Nuevo largometraje checo "Botellas retornables"
Las alegrías y las tristezas que acompañan la vida del hombre es el tema del nuevo largometraje checo "Botellas retornables" que la semana pasada irrumpió en los cines del país.
El protagonista de la película, Zdenek Sverák, quien es autor también del guión, sostuvo que el objetivo fue que el filme no fuera concebido como una simple historia sobre personas de mayor edad. Se persigue transmitir un mensaje concreto, demostrando que también los ancianos están llenos de vida y confían en que todavía les esperan vivencias inolvidables.
"Originalmente tenía pensado escribir el guión en forma de una comedia, para que los espectadores pasaran riéndose desde el comienzo hasta el final del filme. Pero al leer el guión mi hijo, el realizador Jan Sverák, me dijo que no iba a rodar "algo tan superficial". Rehice el guión varias veces y debo reconocer que el resultado es mucho mejor. Aunque la película no provoca risa desde el comienzo hasta el final, toca el corazón", dijo Zdenek Sverák.
La película "Botellas retornables" obliga al espectador a reflexionar sobre diversas situaciones de la vida cotidiana que normalmente no concibe en todo su detalle. La ventanilla donde se devuelven en el supermercado las botellas y en la que trabaja el protagonista del filme, el maestro pensionado, se convierte en un lugar especial, donde las personas comparten su experiencia."Siempre trato de que mis películas vayan más al fondo que, además de una atractiva historia de la vida de las personas, lleven un mensaje humanista que podría ser aplicado en cualquier momento y en cualquier lugar del mundo", señala el director de la película, Jan Sverák.
En la película hay situaciones cotidianas que muchos conocemos de casa de nuestros padres y abuelos. El maestro jubilado le dice por ejemplo a su esposa que está viendo la televisión: "¿Cómo puedes seguir esas estúpidas telenovelas, tú que eres una mujer tan culta?" Y la esposa le responde: "¡Sí puedo y me distraigo, porque contigo ya no hay ni amor ni diversión!". Zdenek Sverák recalca que por experiencia propia puede decir que no es fácil asumir que los años van pasando. Añade que en todo, no obstante, hay que buscar lo positivo."La historia de la película recuerda un poco mi propia vida. También yo fui maestro en una escuela y no sé qué sería de mí si posteriormente no hubiera decidido probar mi suerte en el teatro. Gracias al teatro me mantengo activo hasta hoy", afirma Zdenek Sverák, de 71 años de edad.
A pesar de que "Botellas retornables" es una historia sobre personas de avanzada edad, el tema de la muerte inminente no se toca en ella. Todo lo contrario. Es una película llena de optimismo y vitalidad.