Aunque usted no lo crea

Foto: Malé muzeum bible
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Pastor y teólogo, Vlád’a Donát es el director de un particular museo de biblias ubicado en la pequeña ciudad de Pelhřimov que no solo reúne ejemplares de todo el mundo y ediciones muy curiosas, sino que además se propone mostrar en detalle cómo se imprimían los libros sagrados en distintos momentos de la Historia. 

La Biblia en  idiomas del mundo,  foto: Juan Pablo Bertazza

Si la Biblia es, por lejos, el libro más popular de todos los tiempos con más de cinco mil millones de unidades vendidas, un lugar que se propone ofrecer un recorrido sobre la historia de esos libros sagrados en distintos idiomas vendría a ser también un museo del best seller por excelencia.

El pequeño museo de la Biblia, ubicado en las afueras de la ciudad de Pelhřimov, para empezar no es tan pequeño como anuncia su nombre y está lleno de sorpresas interesantes incluso para agnósticos y personas poco vinculadas con temas religiosos.
Creado en el año 2016, lo primero que sorprende de este curioso sitio es, de hecho, la enorme cantidad de ejemplares que conserva, tal como cuenta su director Vlád’a Donát.

Vláďa Donát,  el director del Museo de la Biblia,  foto: juan Pablo Bertazza

“Tenemos en este museo alrededor de seiscientas biblias, lo cual está incluido en el libro de récords checos, y esas biblias están escritas en alrededor de cien idiomas de todo el mundo”.

Exposición de biblias del mundo,  foto: Juan Pablo Bertazza

Donát agrega que el de Pelhřimov forma parte de una red mundial de museos de biblias que se encuentran, por ejemplo, en Alemania y otros países de Europa. Sin embargo, el más grande del mundo queda en Washington, Estados Unidos, país en el que vivió Donát durante su juventud. Además de pastor, hoy enseña teología bíblica y ya desde muy chico tuvo la idea de dedicarse a predicar. Pero gran parte de esa decisión estuvo inspirada en el ejemplo que le dieron sus padres al profesar la fe católica en un momento muy complicado para cualquier creyente.

“Crecí en una familia cristiana bajo el comunismo, mis padres eran cristianos muy entusiastas y yo me di cuenta por ellos de que no se trataba solo de religión sino que tenían una relación personal con Jesucristo, una experiencia diaria que vivían en todo momento, no solo los domingos; y eso me hizo entender que yo necesitaba tomar esa decisión también para mí, entonces estudié teología para ayudar a otra gente a acercarse a Dios”.

Ejemplares en exposición,  foto: Juan Pablo Bertazza

En situaciones normales, el museo abre todos los días entre abril y septiembre, y fuera de esos meses puede visitarse con cita previa. A pesar de no estar en un lugar céntrico como puede ser Praga, tiene un público muy variado de distintas nacionalidades y colegios de todo el país que realizan talleres sobre la historia de la Biblia.
El material en exposición lo fueron consiguiendo durante estos cuatro años de manos de coleccionistas, amigos, visitantes y algunos remates. En la actualidad, el director del museo está orgulloso tanto del interés que lograron despertar en el público como también de los curiosos ejemplares que tienen a disposición.

La biblia más pequeña del mundo,  foto: Juan Pablo Bertazza

“Tenemos, de hecho, muchas biblias especiales en este museo, desde una versión de Lego o la más pequeña del mundo hasta una Biblia del siglo XVI. Pero, en mi opinión, las más interesantes que tenemos son las que están escritas en las lenguas de los indios de Estados Unidos”.

Sala temática impresión de biblias,  foto: Juan Pablo Bertazza

Al respecto, recuerda muy bien Donát que, en su momento, una visitante estadounidense le preguntó antes de irse si tenía una versión Cheroqui del Nuevo Testamento y, cuando le respondió que no, ella le dijo que pertenecía a esa tribu y, poco después, tuvo la amabilidad de mandarle una edición muy valiosa.
Lo cierto es que, ante la enorme cantidad de ejemplares de todo tipo y tamaño que llenan las estanterías de este museo, con algunas sorpresas insólitas como, por ejemplo, una Biblia en blanco para ir completándola a mano o una realizada por un motociclista, una de las preguntas que surgen, en medio de la visita, es cómo podría definirse de manera concreta lo que es una Biblia.

Exposición de biblias antiguas,  foto: Juan Pablo Bertazza

“La Biblia es una colección de libros o incluso una biblioteca que reúne más de sesenta libros puestos en conjunto y escritos por cuarenta autores durante aproximadamente mil quinientos años, es una colección de libros que mantiene un mismo mensaje porque habla de un mismo Dios”.

Donát tiene en claro que el museo debe ser lo más inclusivo posible. Su objetivo es que el lugar resulte interesante aun para personas no religiosas.

Ediciones de biblias para niños,  foto: Juan Pablo Bertazza

Es decir, la idea es no solo hacer referencia al contenido sino también mostrar los ingeniosos sitios donde las personas escondían las biblias durante el régimen (en la puerta del auto, en un pequeño hueco de la pared o incluso en el pan) y dar cuenta del proceso de impresión que fue teniendo el Libro Sagrado en distintos momentos de la historia, a tal punto que el propio Donát, en un momento del recorrido, imprime con letras de molde una página que el visitante puede llevarse a manera de recuerdo: no solo de la historia sino de su propia visita.

Exposición dentro del museo de la Biblia,  foto: Juan Pablo Bertazza

“Yo leo toda la Biblia y realmente me gusta el libro en toda su extensión pero pienso que mi verso favorito, y creo que también el de muchos cristianos, es del Evangelio de Juan 3,16 que dice: ´Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su único Hijo para que todo aquel que cree en él no muera y tenga vida eterna’”.

Una curiosa biblia sumergible,  foto: Juan Pablo Bertazza

A punto de concluir un año que, a causa de la pandemia, resultó muy difícil a nivel sanitario pero también económico y hasta emocional, Donát quiere compartir con todos nuestros oyentes un mensaje orientado a intentar extraer algún tipo de enseñanza entre tanta dificultad.

“Este año con COVID nos hizo pensar mucho más en nuestras vidas, cuán frágiles somos, y cuán fácil nos podemos romper entonces espero que incluso cuando esto pase mantengamos esta habilidad para entender cuán frágiles somos y que entonces podamos ver lo que el creador nos ha dejado para hacer porque ese es el sentido de la vida”.

Edificio del pequeño museo de biblias,  foto: Juan Pablo Bertazza

En definitiva, quienes decidan conocer la pequeña pero muy interesante ciudad de Pelhřimov ya saben que, además del curioso museo de récords checos, también pueden visitar un museo de biblias que, para muchos, creyentes o no, puede significar una verdadera revelación.

Foto: Malé muzeum Bible