Gran participación en elecciones legislativas
De acuerdo a los resultados preliminares, el Partido Cívico Democrático es el vencedor de los comicios legislativos checos, tras obtener el 35, 3 por ciento de los votos. El segundo lugar corresponde al Partido Socialdemócrata.
Hablando de los demás partidos, según los resultados preliminares, en el cuarto lugar en cuanto al número de votos, figura por el momento el democristiano Partido Popular con el 7, 2 por ciento de los votos, seguido por el Partido de los Verdes con el 6, 3 por ciento.
Las demás formaciones, según los resultados preliminares de las elecciones, no llegarían a integrar la nueva Cámara de Diputados checa con doscientos escaños. Para ello necesitarían superar el límite del cinco por ciento de los votos. A los Demócratas Europeos les entregó su voto el 2 por ciento de los ciudadanos. Las veinte agrupaciones restantes obtuvieron menos del uno por ciento de los votos.
En comparación con las últimas elecciones a la Cámara de Diputados la participación del electorado subió. Se calcula que a las urnas acudió un 64 por ciento de los votantes. En el año 2002 asistió a las urnas el 58 por ciento de los electores.
Desde hace algún tiempo los analistas venían indicando que en estas elecciones se jugaba principalmente la victoria de una de las dos mayores formaciones políticas del país, del gubernamental Partido Socialdemócrata y del opositor Partido Cívico Democrático.
Una de las sorpresas de estos comicios ha sido la llegada de los Verdes al parlamento que, partiendo de la correlación de fuerzas surgida, fácilmente pueden convertirse en el fiel de la balanza en la Cámara de Diputados.
El Partido Cívico Democrático, el Partido Socialdemócrata y los Verdes cuentan con el mismo apoyo entre los hombres y las mujeres. Por su parte, el democristiano Partido Popular se ganó más simpatías entre las mujeres. Por el contrario, entre los electores del Partido Comunista prevalecen los hombres.
En el sondeo realizado por la agencia SC&C contestaron 24 mil votantes en 400 distritos electorales.
Y ahora nos trasladamos al "cuartel general" del Partido Cívico Democrático, donde reina una gran alegría tras conocerse los resultados preliminares de los comicios. El líder de esa agrupación política, Mirek Topolánek, subrayó el alto porcentaje de los ciudadanos que acudieron a las urnas.
El primer ministro socialdemócrata, Jirí Paroubek, no considera el resultado como una derrota para la Socialdemocracia.
"Creo que este resultado no es malo para la Socialdemocracia. Por supuesto me hubiera gustado ganar, pero no tenemos de qué avergonzarnos ".
El vicepresidente del Partido Democristiano, Cyril Svoboda, destacó que las elecciones pusieron en evidencia que la gente desea cambio del clima político.
Los resultados preliminares insinúan que el Partido de los Verdes podría entrar por primera vez en el Parlamento checo, según resaltó el líder de esa agrupación política, Martin Bursík.
"En las elecciones queríamos ganar votos para una nueva corriente política, el Partido de los Verdes. Y lo conseguimos gracias a que nuestra campaña electoral fue concreta y no agresiva."
Por su parte, Miloslav Ransdorf, eurodiputado comunista, destacó las dos principales causas de los resultados desfavorables del Partido Comunista de Bohemia y Moravia.
Los checos votaron por el cambio. Con el triunfo del Partido Cívico Democrático en las elecciones legislativas los checos dijeron no a la socialdemocracia que durante ocho años había llevado las riendas del país.
Los analistas sostienen que después de dos periodos de funciones la gestión socialdemócrata se agotó, al tiempo que muchos electores se asustaron ante la posible alianza entre socialdemócratas y comunistas.
El triunfo del Partido Cívico Democrático representa un alivio para el sector empresarial, ya que su proyecto de gobierno cuenta con una política a favor de la economía de mercado. También es una buena noticia para el propio mandatario Václav Klaus, presidente honorario de dicha formación, ya que el diálogo entre la Casa Presidencial y el Ejecutivo será más fluido. El cambio lo demuestra también la llegada de los Verdes al Parlamento.
