Otra cara del escultor cubista checo Otto Gutfreund
De manera inusual se presenta el legado del escultor cubista checo de la primera mitad del siglo XX Otto Gutfreund en la exposición instalada en la Casa Municipal de Praga. En vez de esculturas, en las salas figuran sus dibujos que documentan la infinita lucha del creador por una expresión artística moderna.
La exposición presenta medio centenar de dibujos y pinturas de Otto Gutfreund que posee la Galería Morava de la ciudad de Brno, donde la valiosa colección fue expuesta a inicios de este año, explicó el comisario de la muestra Petr Ingerle.
"En 2007 se cumplirá el 80 aniversario de la muerte de Otto Gutfreund, uno de los pocos artistas checos que marcaron significativamente el desarrollo del arte moderno europeo. Las pinturas expuestas, junto con las cartas personales, los diarios, y otro material escrito, ofrece al público una nueva imagen sobre el legado artístico de este clásico del arte cubista checo".
Los dibujos representan composiciones figurativas y estudios del cuerpo humano que, sorpresivamente, no encontraron reflejo en su obra plástica. "Todo indica que Otto Gutfreund atribuía un significado específico a los dibujos que, por lo tanto, representan un capítulo aparte en su legado", señaló Petr Ingerle.
Los dibujos de los años 1910 y 1914 reflejan la época expresionista del autor. La pintura más antigua de la exposición representa un desnudo de una mujer sentada, dijo el comisario.
"Los cuadros posteriores documentan la paulatina fascinación del artista por las formas geométricas, inclinación que culminó con la creación de dibujos típicos cubistas. Estas creaciones llevan un sello vanguardista marcado y documentan la búsqueda del autor de una expresión artística propia, influida por sus estudios en 1909 en París, donde visitaba el estudio del escultor francés Antoine Bourdell".
Otto Gutfreund es considerado el pionero del cubismo checo. Se trató del único escultor que durante su carrera pasó por todas las fases de la evolución de esta corriente artística. Los expertos coinciden en que sus obras de la época del cubismo analítico no tienen parangón a nivel mundial.
Sus creaciones nunca fueron producto de una idea estética casual. Su trabajo sobre la escultura era casi científico y siempre partía del análisis de la forma y de la necesidad de seguir toda una serie de reglas artísticas. Confiaba que este empeño le posibilitaba a diseñar una escultura perfecta.
La obra de Gutfreund fue influenciada por sus dos estancias en París donde conoció a Rodin, Picasso, Apollinaire y otros grandes de la época. En 1920 se incorporó a la Asociación checa de Artistas Plásticos Mánes y varios años más tarde fue nombrado profesor de la Escuela de Artes Aplicadas, de Praga.
Según indicó Petr Ingerle, la actual muestra en la Casa Municipal de Praga representa un prólogo de una serie de actividades que tendrán lugar en la República Checa el próximo año con motivo del 80 aniversario del fallecimiento de Otto Gutfreund.