República Checa pone veto al encarecimiento de la cerveza
La República Checa rechazó este martes el proyecto de la Unión Europea sobre el aumento del impuesto sobre la cerveza. El veto checo significa que en general las tarifas mínimas sobre el alcohol quedarán iguales en los países comunitarios.
"Nos esforzamos por mantener la relación entre los precios de cerveza y vino evitando que la cerveza tenga una desventaja en el mercado europeo".
La Comisión Europea proponía aumentar el impuesto sobre la cerveza en el 31 por ciento. La idea fue combatir el alcoholismo y proyectar así la inflación existente en el precio de la cerveza en la actualidad. Tras haber criticado Alemania y la República Checa ese proyecto, la Unión propuso un aumento del 4,5 por ciento, incrementando en el futuro automáticamente el impuesto cada tres años en función del crecimiento de la inflación.
Mientras que Alemania estaba dispuesta a aceptar tal proyecto, la República Checa lo rechazó, a pesar de que ese porcentaje no afectaría hoy día el precio de la cerveza en la República Checa.
Por ello, algunos eurodiputados checos criticaron la postura del ministro de Hacienda, como por ejemplo, Zuzana Roitová."No tiene sentido ir en contra de todo el Consejo Europeo, además, tomando en consideración que el proyecto no afectaría actualmente a los consumidores de cerveza en la República Checa".
Por su parte, el economista David Marek subrayó para la Televisión Checa que cada país debería aprovechar plenamente el derecho de veto para defender sus intereses en la Unión.
"Por ejemplo, Polonia es mucho más rigurosa que la República Checa a la hora de defender sus intereses económicos en las instituciones europeas".
Los países comunitarios intentarán encontrar un compromiso en cuanto al impuesto sobre la cerveza en el primer semestre del próximo año, cuando Alemania se encargue de la presidencia de la Unión.