Gobierno sobrevivió moción de censura
El gobierno de Mirek Topolánek pasó el susto. Por cuarta vez sobrevivió una moción de censura. La Socialdemocracia y los comunistas no lograron los votos suficientes en la Cámara de diputados para desbancar a la coalición gubernamental.
La Cámara de diputados tiene doscientos escaños y para aprobar la moción de censura eran suficientes 101 votos, pero socialdemócratas y comunistas lograron juntar 96, de un total de 199 presentes, y eso no alcanzó.
Tras la dura derrota en los comicios regionales de la semana pasada el oficialismo se anotó dos victorias este miércoles en el Parlamento: la moción de censura fue rebotada y los legisladores aprobaron el proyecto de presupuesto.
El primer ministro Topolánek pudo respirar profundo y quitarse un peso de encima al menos por el momento. El viernes y sábado próximos tendrá lugar la segunda vuelta de las elecciones senatoriales en las que su formación luchará por mantener la mayoría.
“Este gobierno sobrevivió la cuarta moción de censura, así que continuará trabajando. Me alegra que dispongamos de tiempo para seguir cumpliendo los objetivos de nuestro programa de gobierno”, subrayó Topolánek.El líder opositor Jiří Paroubek anunció que pronto exigirá al primer ministro Mirek Topolánek que pida al Parlamento un voto de confianza para el Gobierno.
De acuerdo con Paroubek la votación demostró que el Ejecutivo no dispone del respaldo de la mayoría parlamentaria, porque a favor votaron 97 diputados, los restantes se abstuvieron o simplemente no votaron.
Si bien Topolánek salió airoso de esta batalla, la votación demostró que dentro de las formaciones de la coalición gubernamental no reinan ni la unidad ni la armonía.Tres diputados del Partido Cívico Democrático se abstuvieron y dos diputadas de los Verdes no participaron en la votación, y no debemos olvidar a un tránsfuga, antes de la oposición, que premeditadamente anunció que estaría ausente el día de la votación.
Todo parece indicar que Mirek Topolánek tendrá que seguir repeliendo los ataques naturales de la oposición, pero no puedo descuidar la retaguardia donde crecen las fisuras en el seno de la propia coalición gubernamental.