Praga tendrá el tramo de ciclovía más caro de Europa
Un tramo de tres kilómetros de carril para ciclistas ha costado en Praga unos cinco millones y medio de euros, lo mismo que habría costado hacerlos de carretera de primera categoría. En el Ayuntamiento se buscan responsabilidades al haber gastado casi el doble de lo aprobado por la Alcaldía en 2007.
Un tramo de ciclovía en la zona de Vysočany en Praga será seguramente el más caro de Europa cuando se inaugure en marzo. Casi dos millones de euros por cada kilómetro, cuando el precio habitual en la capital checa es de apenas 260.000 euros por kilómetro. En este caso, cuatro puentes sobre carreteras con los que contaba el proyecto elevaban considerablemente la cuantía, en especial uno de 212 metros de largo. Pero las alarmas saltaron al descubrirse que, si el Ayuntamiento aprobó hace tres años un presupuesto de 3.300.000 euros para toda la obra, finalmente se han gastado unos 5.500.000.
“Si al final se ha llegado a casi seis millones de euros, es porque el dinero ha terminado donde no debía. Desde el principio, ha faltado transparencia en el proyecto. El Ayuntamiento acordó el intercambio de unos terrenos muy lucrativos por otros sin valor por el trazado de este carril bici. Incluso la misma empresa nos planteó si era tan necesaria esta ciclovía”.
Por su parte, Jiří Toman, director del Departamento de Inversión Local del Ayuntamiento justificaba el coste de la obra por el encarecimiento en estos tres años del precio del acero. Según Toman todas las propuestas de las empresas constructoras superaban de largo el presupuesto previsto por
El presidente de la comisión de tráfico de bicicletas de Praga, Pavel Polák, además de destacar la belleza y calidad de los puentes, defiende que no era posible elegir otro trazado. De igual manera advierte que cada vez quedan menos lugares en Praga por donde hacer ciclovías baratas. Los tramos necesarios para seguir desarrollando la red de carril bici de Praga son de gran dificultad técnica y por tanto, de precio elevado. Como por ejemplo, destaca Polák, solucionar el tránsito de bicicletas por el túnel bajo el castillo de Vyšehrad, que actualmente solo se puede hacer echando pie a tierra.
