El Museo Nacional se prepara para la mayor reforma de su historia
Salvar uno de los principales monumentos nacionales, en estado de deterioro grave, ampliar en casi el doble su superficie y crear una nueva exposición moderna y atractiva es el objetivo de una futura reforma del Museo Nacional de Praga, la más amplia de su historia.
Dentro de poco tiempo, el monumento se estremecerá de nuevo. Pero esta vez, no será bajo disparos de armas enemigas. Durante los próximos cuatro años, el edificio histórico del Museo se someterá, por primera vez en su historia, a una amplia restauración. Según su director, Michal Lukeš, la salvación llega en el último momento.
“El edificio está en un estado de deterioro notable. No cumple las normas de seguridad contra incendios y supone un riesgo para las exposiciones, los empleados y los visitantes. Si no se procede pronto a una amplia reconstrucción, estaremos obligados a cerrarlo, lo que resultará incómodo para todos”, advierte Lukeš.La restauración del histórico edificio representa sólo una pequeña parte del proyecto arquitectónico que hará cambiar notablemente el aspecto del monumento. Se planea abrir al público los sótanos del Museo y conectarlos mediante un túnel con el edificio vecino, antigua sede del Parlamento comunista. Los visitantes podrán subir a la cúpula del edificio y disfrutar de unas hermosas vistas de la ciudad o refrescarse en alguno de los restaurantes o cafeterías del Museo.
La superficie del Museo casi se duplicará y permitirá crear una exposición permanente mucho más grande y moderna, según afirma el director del Departamento Histórico, Pavel Douša.
“La nueva exposición será dividida en tres secciones: ciencias naturales, ciencias sociales y una parte general que abarcará todos los temas relacionados con la interacción entre el hombre y el medio ambiente. Queremos contar a los visitantes la historia de la naturaleza y del hombre desde el surgimiento de nuestro planeta hasta nuestros días”, recalcó Douša.La reconstrucción del Museo Nacional de Praga comenzará a fines del próximo año y debería finalizar en 2015. Sus costes superarán los 175 millones de euros.
La dirección del Museo confía en que, antes de que se lleve a cabo la reforma, logre convencer al Gobierno para solucionar el problema con la Magistral, una carretera sumamente frecuentada que pasa justamente delante del Museo y lo perjudica gravemente.