Enfado presidencial, vergüenza futbolística y poesía del alma
La primera comparecencia del presidente Václav Klaus ante la Cámara Baja en siete años, para criticar al poder judicial y la Unión Europea, entre otros asuntos; la dolorosa y traumática derrota de la selección checa ante Lituania en las eliminatorias a la Eurocopa 2012; un Festival de Comida Mexicana para celebrar el Bicentenario de esa nación; y un poco de poesía, con la voz atenta y profunda del vate argentino Alberto Szpunberg, que visitó Praga.
Ha vuelto a cargar contra algo que le molesta, esta vez el comportamiento del Tribunal Constitucional, en su primera aparición ante el Parlamento en siete años. Y lo hizo con el hablar pausado y firme que le caracteriza.
El primer mandatario sugirió a la Cámara de Diputados que debería cambiar las atribuciones del Tribunal Constitucional para que los magistrados no dispongan de más poder del que deberían tener.
En su comparecencia ante la Cámara Baja, Klaus tampoco se olvidó de la Unión Europea, blanco frecuente de sus venenosos dardos. El presidente criticó que los diputados acaten mecánicamente todas las normativas europeas que no tienen que ver directamente con el espacio único.
Sin fútbol ni ideas, sin rapidez ni ganas, el combinado nacional perdió en su debut, el martes, más encima en casa, por 0-1 ante la modesta y desconocida selección lituana. Y de esa forma se complicó tremendamente su pase al campeonato europeo más importante.
El volante del Arsenal pidió la pelota, la distribuyó bien, pero no tuvo un goleador digno que le hiciera compañía. Tras la sorpresiva derrota ante Lituania, Rosický enfrentó con dignidad a la prensa.
“Esta derrota es una tremenda decepción, no podíamos haber empezado peor la calificación a la Eurocopa 2012. Nos complicamos terriblemente, pero el fútbol tiene estas cosas. Aún estamos a tiempo de enmendar el rumbo, este fue solo el primer partido y podemos mejorar, pero empezar así es una gran decepción”.
Sin duda que el seleccionador Michal Bílek, cuyo puesto pende de un hilo con muchas voces que exigen su inmediata destitución, tendrá un arduo y complicado camino si espera llevar a los checos a la Eurocopa 2012.
“Creo que Pilsen se merece el título, sobre todo, por el cambio que ha experimentado durante los últimos 20 años. De una sucia ciudad industrial se convirtió en un lugar bonito, lleno de cultura y agradable para vivir. En este sentido, puede servir de ejemplo a otros países europeos”, destacó el alcalde.
Sin embargo, la metrópoli del norte de Moravia tendrá nuevas oportunidades, en el futuro, de convertirse en la Capital Europea de la Cultura, como deseaban sus habitantes.
¡Viva México! Ese grito pudo escucharse muchas veces en el Hotel Hilton de Praga, el miércoles por la tarde, durante la inauguración del Festival de Comida Mexicana, que coincide con los actos de celebración del Bicentenario de la Independencia de esa gran nación.
“Este festival quiere dar a conocer al mundo todo lo que es la comida mexicana y especialmente vamos a estar aquí festejando el Bicentenario de México. Contamos con el apoyo de la Embajada de México aquí en Praga y del Hilton Praga, por eso se hace aquí. Estaremos aquí a partir de este jueves y hasta el 19 de septiembre”.
-¿Qué tipo de platos van a estar presentes en el menú acá?
El Festival de Comida Mexicana incluye también una gran variedad de postres típicos (alguno con chile, pero que no pica, asegura el chef), y no faltarán ni el tequila ni la cerveza Corona, que también tiene sus fans por estas latitudes.
El horario de atención será de 12.30 a 15.OO horas para el almuerzo y desde las 18.00 hasta las 22.00 horas para la cena, siempre en el hotel Hilton de Praga.
“Yo, Piatock, vi muchas cosas en mi vida: en vísperas del día más terrible de todos los días, asistí al parto de un cordero de dos cabezas: con la una asentía, con la otra negaba, pero en sus cuatro ojos brillaba la misma única mirada de los que de una u otra forma van a morir”.
La obra de Alberto Szpunberg aspira a recuperar la tradición humanista judía, para intentar un cambio de conciencia en el mundo, a través de la poesía, como él mismo explicó a Radio Praga.
Durante su visita a la República Checa Alberto Szpunberg estuvo principalmente en Terezín, el ex campo de concentración nazi, y en el barrio judío de Praga, que tantos buenos recuerdos le trae aunque nunca había estado ahí antes: el Golem, el monstruo mítico, marcó su infancia y este viaje fue como saldar una deuda con el destino.
