El nuevo director de la televisión pública dirigió el mayor canal privado del país
La Televisión Checa ya tiene a un nuevo director general. Petr Dvořák, antiguo director del mayor canal de privado llevará las riendas de la televisora que representó para él su mayor competencia.
La Televisión pública y los canales privados compiten por los televidentes. Dvořák asegura que tendrá que aprender a dirigir un ente público, pero aún así su presentación convenció a los miembros del Consejo de la Televisión que en segunda vuelta le dieron 12 de un total de 15 votos.
El presidente del Consejo, Milan Uhde, antiguo ministro de Cultura, expresó su satisfacción con el resultado de la elección.
“Creo que fue una buena elección. El señor Dvořák presentó un buen plan de trabajo, muy preciso, y cumplió además con todos los requisitos que se pidieron a los candidatos”, sostuvo Uhde.
El nuevo director de la Televisión Checa se enfrentará a uno de los problemas típicos de los entes públicos: el presupuesto. Debido a la política de recortes fomentada por el Gobierno, todas las instituciones públicas han sufrido una reducción de sus ingresos, al tiempo que el estilo de trabajo es diferente.Un total de 36 personas compitieron por el puesto, pero solo cinco pasaron a la recta final. Desde el principio Dvořák figuró como el favorito por su experiencia en la televisión privada.
El Consejo de la Televisión, un variopinto grupo de personas cuya elección debe aprobar la Cámara de diputados, no ocultó desde el principio que la elección sería difícil, ya que cada uno de los finalistas ofrecía un punto de vista interesante para sacar adelante al ente público.
Extraño fue el hecho de que algunos de los candidatos fueron citados por los políticos antes de la elección. Dvořák no fue la excepción, el propio primer ministro, Petr Nečas, le recibió y se interesó por los planes futuros en caso de que ganara la elección.En su primera intervención pública, Petr Dvořák dijo que los primeros cambios de programación pueden notarse en diciembre y los grandes cambios llegarán en la primavera de 2012. Dvořák quiere dedicar atención a la programación infantil y al humor político, temas escasos o ausentes en el ente público, según adelantara.