La energía verde encarece el precio de la electricidad
El próximo año aumentará de nuevo el precio de la electricidad. Los recortes económicos ahogan a las prisiones checas. La genética tiene la última palabra a la hora de elegir pareja para toda la vida. Estos son algunos de los temas abordados por los diarios checos este viernes.
Respecto a los hogares las estimaciones hablan de un incremento del 6%, mientras que en el caso de las empresas será de un 8%. La cuestión más compleja a la hora de decidir cuánto pagarán los consumidores son las subvenciones para las energías renovables.
El año pasado el apoyo a la energía verde costó más de 1,2 millones de euros y de esa suma casi medio millón de euros lo pagaron los consumidores.
Así que este año los hogares, a raíz del apoyo a la energía verde, pagan por cada megavatio hora 15 euros más y el año que viene la tasa ecológica representará más de 17 euros.
Las cárceles checas están ahorrando todo lo posible. Sin embargo, aún así no les alcanza el dinero ni para la alimentación de los prisioneros, escribe Lidové Noviny.
Hace más de un año que los jefes de las prisiones se están rompiendo la cabeza con la cuestión de cómo reducir los gastos de funcionamiento de los establecimientos que gestionan.
Aparte de los recortes financieros habituales, los directores de las cárceles han tenido que acudir a medidas como cortar la electricidad y el agua caliente a los reclusos. Los prisioneros pueden ducharse una vez a la semana durante tres minutos. Se les distribuye agua para que se preparen un café en un momento determinado del día. También la frecuencia de lavar la ropa ha disminuido.
Además los programas destinados para la reinserción social de los reclusos han sido suspendidos. Actualmente la mayoría de los centros correccionales están excediendo su capacidad en más de un tercio. El año pasado los directores de prisiones utilizaron los ahorros para cubrir dichos gastos, así que el próximo año hallar nuevas fuentes de ingreso será crucial.
El documento, en palabras de los comunistas, promueve la creación una de un nuevo mundo.
Así lo cree la doctora Renata Gaillyová, jefa del Departamento de Medicina Genética del Hospital Universitario de Brno, quien agrega que la genética todavía no sabe impedir la aparición de una enfermedad pero sí sabe prevenirla.
Después depende de los padres si deciden acabar con el embarazo o se preparan para tener un hijo discapacitado. Según Renata Gaillyová la mayoría de mujeres opta por la primera solución. Sin embargo, hay parejas que deciden criar a un niño discapacitado.
