El Gobierno dice que repartirá millones
El Gobierno anuncia que ya no va a aplicar recortes, ahora repartirá millones; la píldora abortiva llega a Chequia; más del 30% de los checos no leyeron ni un libro a lo largo del año. Estos son algunos de los temas abordados por los diarios checos este miércoles.
La popularidad del Gobierno y de los partidos de coalición anda por los suelos, hecho claramente demostrado durante las elecciones regionales y senatoriales ganadas por la oposición.
El Ejecutivo anunció que ponía fin a los recortes y que a partir de ahora repartirá miles de millones, informa en primera plana el diario Lidové Noviny.
Los propietarios de los inmuebles recibirán ayudas del Estado siempre y cuando cumplan los parámetros más exigentes para el ahorro de energía en sus viviendas, informa Lidové Noviny.
La polémica píldora se abre camino entre los especialistas checos. En caso de ser registrada entre los fármacos legales las interesadas la podrán comprar sin receta médica.
El ginecólogo Jaroslav Imrych estima que los debates en torno a la píldora resultan un tanto fuera de lugar si se toma en cuenta que en Chequia el aborto es legal.
“La píldora debe ser recomendada a la paciente por un médico, no debemos equivocarnos y creer que es una decisión de las mujeres sin consulta previa” indicó Imrych.
La píldora abortiva es legal desde hace 20 años en Francia, Gran Bretaña, Suecia y Alemania.
De acuerdo con algunos economistas, en el caso de Chequia las dificultades pueden surgir a la hora de conceder las licencias para la venta del fármaco, cierra Mladá Fronta Dnes.
La Oficina de Estadísticas publicó un reporte que indica que más del 30% de los checos no leyó un solo libro a lo largo de todo el año.
El estudio arrojó datos aún más alarmantes ya que el 42% de los consultados está convencido de que las personas adultas no necesitan continuar desarrollándose intelectualmente.
A pesar de las campañas sobre la importancia de estudiar idiomas, el 30% de las personas entre los 19 y 68 años dijo que no eran capaces de comunicarse en otro idioma que no fuera el checo, informa Právo.
