La insuficiencia de técnicos cualificados amenaza la economía checa
Pospolu es un nuevo proyecto nacional que persigue una mejor preparación profesional de los estudiantes de la enseñanza media y aprendices de disciplinas técnicas, mediante la estrecha colaboración con el mundo empresarial. El programa reacciona al peligro de que en un futuro próximo, la insuficiencia de técnicos cualificados podría rebajar el nivel competitivo de la economía checa.
”Lo fundamental del proyecto es impulsar un sistema de enseñanza de disciplinas técnicas que esté ligado estrechamente con la práctica. Desde hace años insistimos en promover semejante forma de aprendizaje que garantice el continuo desarrollo industrial del país. Hay que superar ese abismo que existe entre las escuelas y las empresas de producción y convencer a ambas partes de que se necesitan mutuamente y que sólo en conjunto traerán beneficio a la sociedad”.
El proyecto denominado Pospolu que, traducido al español significa En conjunto, es un programa piloto que reacciona a las demandas planteadas por el sector industrial desde hace años y propaga las disciplinas técnicas. Mientras que en el mercado laboral del país comienzan a faltar especialistas técnicos como soldadores, labradores, ajustadores y otros profesionales, los egresados de escuelas de orientación humanista no encuentran trabajo.En vista de la importancia del proyecto, fue acordado destinar a su realización más de 2 millones de euros de los fondos estatales y del fondo social europeo.
Se calcula que en cada región del país podrían surgir al comienzo unos dos grupos asociados de escuelas y empresas industriales y, en base a los resultados, su número se ampliaría en el futuro, indica Pavel Juříček.
”Pospolu es un proyecto de formación profesional dual, o sea que la teoría se enseñará en las escuelas y las disciplinas prácticas se realizarán en empresas industriales, que están mucho mejor equipadas técnicamente. Confiamos en que los estudiantes y aprendices de disciplinas técnicas tendrán una mayor motivación para el estudio, sabiendo que tendrían una buena perspectiva de encontrar trabajo posteriormente, ya que estarán bien preparados profesionalmente”.Un programa de estudios semejante se practica ya en Alemania y está dando muy buenos resultados, según Juříček. En la República Checa, centenares de escuelas y unas cien empresas industriales manifestaron su interés en participar en el proyecto piloto Pospolu. Otros interesados pueden inscribirse hasta el 8 de agosto.
Los promotores del proyecto cuentan con que en el futuro éste podría desembocar en la adopción de medidas legislativas que garantizarían una mayor interacción entre las escuelas y las empresas también en otros sectores de la economía nacional. El programa podría ayudar así a la disminución del índice de desempleo en el país, afirma Juříček.