Plan de rescate a la mina Paskov divide al gobierno
El gobierno checo de centro-izquierda se enfrenta a uno de sus mayores retos desde su formación a principios de año: la clara división entre los socialdemócratas y sus socios de la coalición en relación a las propuestas para extender la vida de la mina de carbón Paskov.
Según Babiš, la ayuda económica a la mina Paskov sentaría un precedente y el gobierno podría encontrarse con más demandas de dinero por parte de otras empresas en crisis o incluso con el incremento de las peticiones monetarias por OKD. La dura postura del líder de ANO fue apoyada por el líder democristiano Pavel Bělobrádek.
Por su parte, el primer ministro checo Bohuslav Sobotka reaccionó diciendo que intentaría, junto con el ministro de Industria Jan Mládek, convencer a sus compañeros de gobierno en relación a la propuesta de ayuda estatal. A finales de abril, expirará el memorándum entre OKD y el gobierno para sellar un acuerdo sobre la mina Paskov.
A pesar de su posicionamiento, Babiš reconoció que desconoce los detalles de las negociaciones con OKD. De esa forma, todavía queda espacio para la negociación y para que los precios de la hulla se recuperen, lo que permitiría que la mina Paskov fuese viable de nuevo en manos privadas, dijo Babiš.
El precio de la hulla producida por OKD y destinada a plantas de calefacción y de coque, para la posterior producción de acero, se ha reducido alrededor de un cuarto en el último año y no hay indicios de que la situación vaya a mejorar.