Los ancianos son un blanco fácil para los estafadores
Más de seis mil personas de la tercera edad fueron blanco en la República Checa de ataques y atracos en la calle, así como de fraudes y robos de ahorros personales durante el año 2013. Los delincuentes se apropiaron de esta manera de más de un millón de euros.
Los delincuentes no vacilan en llevarse el dinero que una persona de edad avanzada fue ahorrando durante toda su vida. Esto ocurre con frecuencia, sostiene el detective de la policía, Lukáš Průcha, de Praga.
“Recuerdo el caso de una señora de 60 años de Praga, ya jubilada, que hemos investigado el año pasado. A su casa llegó un día una desconocida, tocó el timbre y le dijo a la señora que serían cambiadas las ventanas en el edificio. La señora dejó entrar a la desconocida a su apartamento y ésta, diciendo que debe revisar el estado actual de las ventanas, dejó abierta la puerta de entrada. Al rato se despidió y se fue. Pasado poco tiempo la señora se dio cuenta de que de su casa desaparecieron 22.000 euros que eran los ahorros de toda su vida”.
La señora, con mayor probabilidad, ya nunca llegará a recuperar su dinero, ya que en la mayoría de los casos los policías no logran descubrir a los delincuentes de estos delitos. La mayoría de las personas de la tercera edad no es capaz de describir al delincuente, lo que dificulta el trabajo de los investigadores. Además, si se logra detener a algún criminal, éste ya no tiene el dinero u otros artículos robados y, a pesar de ser condenado por los tribunales, su situación económica suele ser tan mala que la indemnización al damnificado no tiene de qué pagarla.La Policía afirma que a la delincuencia contra las personas de la tercera edad se dedican cada vez más grupos organizados o familias enteras que viven de este tipo de delito. Los ancianos son un blanco fácil para estos criminales, ya que muchos suelen vivir solos y abandonados, en vez de tener su dinero en un banco lo tienen en casa, y la mayoría son demasiado confiados, indica Lukáš Průcha.
Varias organizaciones cívicas tratan de ayudar a las personas de la tercera edad a superar los problemas que puedan llegar a enfrentar en su vida cotidiana. Entre ellas la asociación Elpida, que puso en funcionamiento también una línea de teléfono gratuita para las personas mayores. A ésta los ancianos pueden llamar en caso de cualquier problema o preocupación, indica su director, Jiří Hrabě.
”El 17% de todas las llamadas de las personas de la tercera edad, o sea unas 5.000 llamadas al año, son reacciones a alguna estafa o robo. Los jubilados preguntan a nuestros colaboradores cómo deben proceder y qué hacer para recuperar eventualmente su dinero u otros artículos que les fueron robados. Registramos también muchos casos de maltrato domiciliario a los ancianos por parte de sus familiares. Nosotros estamos aquí para ayudarles. Para que las personas de la tercera edad tengan a alguien a quien puedan dirigirse y plantearle con toda confianza sus preocupaciones”.La organización Elpida y también otras entidades que ayudan a las personas de la tercera edad señalan no obstante que, aunque les advierten a los jubilados del creciente peligro de robos y estafas por parte de algunos individuos y les recomiendan cómo cuidar de sus ahorros y cómo protegerse, muchos ancianos no se guían por sus recomendaciones y piden ayuda cuando ya es tarde.