Ferrocarriles Checos invierte más de mil millones en modernizar vehículos
La compañía pública Ferrocarriles Checos ha invertido en los últimos seis años más de 1.100 millones de euros en modernizar su parque de vehículos. Como resultado ahora un tercio de los vagones dispone de aire acondicionado y la mitad cuenta con un nuevo sistema de inodoros cerrados.
La mayor parte de las inversiones han ido destinadas al transporte regional, donde se ha gastado el 60% del presupuesto, el 40% restante se ha invertido en la modernización de los vehículos para largas distancias.
La edad promedio de las locomotoras alcanza actualmente los 19 años. En el caso de los vagones, esta cifra ascienda a los 23 años. En el cálculo los vehículos renovados cuentan como si fueran nuevos, con una edad de cero años. En el caso de que se contara desde su fecha de fabricación, la edad promedio del parque móvil de Ferrocarriles Checos aumentaría unos diez años.
Como en otras partes del mundo, la tendencia es hacia la sustitución del sistema clásico de vagones tirados por una locomotora y la puesta en marcha de unidades integradas que comprenden al mismo tiempo cabina y espacio para los pasajeros. De esta manera, entre 2011 y 2015 se redujo el número de locomotoras de 280 a 223 unidades, y de vagones convencionales de 2.716 a 2.132.
Entre las inversiones para los próximos años destaca la compra de 50 vagones capaces de alcanzar una velocidad de 200 kilómetros por hora, que se usarán en la línea Praga-Bratislava-Budapest. También se comprarán nuevas unidades eléctricas para las líneas expreso del país.