La ganadería ovina renace en Chequia
La ganadería ovina experimenta en Chequia una especie de renacimiento. Cada vez hay ovejas en los pastizales y no sólo por su carne. Los productos lácteos a partir de la leche de oveja empiezan a hacer acto de presencia en los supermercados.
Las estadísticas indican no obstante, que el consumo promedio anual per cápita es de 500 gramos de carne. El mayor consumo se registra durante las celebraciones de la Semana Santa.
Uno de los mayores mataderos, TORO Hlavečník de la ciudad de Hradec Králové que se dedica al sacrificio de animales a lo largo de todo el año la demanda para esta Semana Santa fue muy elevada.
El jefe de la empresa, František Štefunka, informó que 10 días antes de las celebraciones de Pascua sacrifiran entre 500 y 600 corderos, lo que representa un tercio de la ventas anuales.
Otros animales se importan ya sacrificados para ser procesados en el país. La cadena mayorista Makro confirmó que las ventas de carne de ganado ovino se disparan en la Pascua.
Desde el punto de vista de la calidad entre la carne porcina y ovina no existe mayor diferencia. Así lo expresó Milena Fanta de la Escuela Superior de Agricultura, que indica que la carne de cerdo contiene cada vez menos grasa debido a que éstos animales se crían de tal manera que sea posible reducir los niveles de grasa.
Los productos de leche de oveja como quesos y yogures aparecen en mayor medida en tiendas y supermercados, pero todavía tienen un gran brecha por delante aseguran los productores que mantienen su optimismo.