La intensidad del tráfico dificulta la circulación en Chequia
La intensidad del tráfico ha aumentado en un 13% en los últimos seis años en Chequia. Esto se nota en todas y cada una de las vías de comunicación, según informaron fuentes de la Empresa de Carreteras y Autopistas.
Un estudio de la empresa de Carreteras y Autopistas, publicado este jueves, sostiene que la intensidad del tráfico ha crecido en un 13% en los últimos seis años.
La arteria más sofocada es la autopista D1 que comunica la capital con la ciudad de Brno. Los expertos explican que la elevada intensidad del tráfico afecta a la vía a lo largo de toda su extensión.
La arteria más sofocada es la autopista D1 que comunica la capital con la ciudad de Brno.
En Praga el tramo más afectado también pertenece a la autopista D1 y se encuentra cerca del barrio Chodov, por ahí circulan diariamente más de 99.000 vehículos.
El portavoz de la empresa de Carreteras y Autopistas, Jan Rýdl, dijo que el aumento de la intensidad del tránsito afecta tanto a las autopistas como a las carreteras secundarias.
“La mayor intensidad de tráfico fue localizada en las grandes ciudades. En promedio podemos decir que la mayor intensidad de vehículos se encuentra en la carretera conocida como 1/43 que es la salida de la ciudad de Brno. En promedio circulan por el lugar un total de 53.000 vehículos diarios”.Durante muchos años los atascos fueron para los checos un asunto que no les quitaba el sueño, pero hoy la realidad es muy diferente. El parque de vehículos en la República Checa supera los cinco millones de unidades, un número preocupante para una población de un poco más de diez millones de habitantes.
Las dificultades a partir de la enorme cantidad de vehículos se incrementan debido a que las ciudades no disponen de suficientes plazas de estacionamiento.
En Praga hay 300.000 puestos públicos para aparcar, pero el número de carros registrados es de 730.000, sin contar a los que viajan desde otros sitios diariamente al trabajo o por turismo.
El boom de la construcción que se vive en Chequia tampoco ayuda a reducir las consecuencias del crecimiento de la intensidad del tráfico, sino todo lo contrario.
Las empresas que construyen edificios de viviendas y oficinas casi nunca crean condiciones satisfactorias para el estacionamiento de vehículos de los nuevos inquilinos.