Škoda Auto apuesta por el almacén automático
La empresa automovilística Škoda Auto puso en funcionamiento un almacén automático en su centro de Mladá Boleslav a fin de acelerar los procesos logísticos.
Los componentes para los automóviles son llevados al almacén por los empleados en unos grandes transportadores. A su entrada la labor humana se acaba, de acuerdo con David Vostrý, coordinador del proyecto del almacén automático en Škoda Auto.
”La operación ulterior la asume un robot, que cuenta con una cámara, capaz de distinguir la forma en que están amontonadas las diferentes piezas. Tras analizarlo, el robot se pone a separarlas y a ubicarlas dentro del almacén en las paletas y estanterías correspondientes. O sea que distribuye los diferentes tipos de componentes en diferentes cajas que luego ubica en las paletas a fin de que estén listos para ser extraídos de la estantería y enviados al centro de complementación”.
Cada pieza pasa por una pesa que forma parte del sistema automatizado, y luego le es asignado un código en base al que es ubicada en una paleta determinada en las estanterías. El sistema también distingue los componentes utilizados con más frecuencia, a los que ubica en lugares más próximos al centro de transporte automatizado.
Cada uno de los diferentes tipos de piezas para los automóviles se guarda además en varios lugares del almacén, lo que también tiene su motivo, según explica David Vostrý.
”Esto es muy importante, ya que permite que en caso de surgir algún problema técnico en una parte del almacén, una determinada pieza esté a disposición en otro lugar. Así el proceso no se interrumpe y el componente necesario es despachado del almacén”.
Las estanterías del nuevo almacén automático de Škoda Auto, en la ciudad de Mladá Boleslav, tienen 14 metros de altura y ocupan un área de 2000 metros cuadrados. Caben en ellas unas 70 000 cajas con componentes de menor tamaño. En caso de que se le presentara algún problema en el suministro de componentes para automóviles a la fábrica de Mladá Boleslav, las piezas que se guardan en el almacén automático bastarían para cubrir las necesidades de producción de los automóviles durante unos seis días.
La alta efectividad de los almacenes automáticos es el motivo de su creciente popularidad a nivel mundial. Su sistema tiene la capacidad de preparar y enviar las diferentes piezas al centro de producción de tal manera que sigan una tras otra respetando el proceso de su complementación en los equipos finales, y en el momento en que se hacen necesarias, sostiene David Vostrý, comentando el caso concreto de Škoda Auto.”Esto naturalmente, elimina al factor humano y ayuda a evitar errores en el envío de los componentes a la línea de montaje de los automóviles. Además, los trabajadores en las líneas no se ven obligados a verificar los códigos de cada pieza, y a buscar si las tienen preparadas en las cajas a su derecha o a su izquierda. Esto gracias a la tecnología de los almacenes automáticos, que lo preparan todo de acuerdo a las necesidades del proceso de producción, caja por caja. El trabajador en la línea lo tiene todo a su alcance y ubicado de la forma necesaria”.
Los analistas prevén que los sistemas de almacenamiento automáticos serán aprovechados pronto también por otras empresas productivas de Chequia, siguiendo el ejemplo de otros países desarrollados del mundo.