Las agencias de viajes checas contra las cuerdas
La cancelación masiva de excursiones como reacción inmediata a la expansión del nuevo coronavirus ha puesto a las agencias de viajes checas contra la cuerdas.
Las agencias de viajes checas se enfrentan a una situación que nunca antes habían experimentado. Debido a la declaración del estado de emergencia en la República Checa y a la confirmación de la expansión del nuevo coronavirus, miles de personas han optado por cancelar sus viajes y excursiones ya pagados.
Las dificultades surgen en ambas partes, clientes ni propietarios de las agencias saben con certeza cuál es el procedimiento exacto a seguir. La Asociación de Agencias de Viajes está trabajando contrarreloj para lograr un procedimiento concreto y satisfactorio para todos.
Por razones obvias los checos compran menos viajes. Las agencias han informado de una disminución de un quinto en las ventas en comparación con el año pasado.
Algunas agencias no han dudado en devolver a sus clientes la totalidad del precio, se trata en primer lugar de estancias en los centros de esquí. Sin embargo, algunas agencias de viajes ofrecen a sus clientes un aplazamiento y pasar la excursión pagada para la próxima temporada. Esta opción no ha topado con mucha aceptación entre los clientes.
El portavoz de la agencia de viajes Nev-Dama Jan Bezdek dijo a la Radio Checa que habían optado por devolver el dinero, porque no estuvieron en condiciones de cumplir el contrato. “En este punto, tenemos que retirarnos del contrato porque no podemos proporcionar los servicios a nuestros clientes y devolveremos parte del dinero a los clientes que tuvieron que regresar de Italia después de uno o dos días“.
Petr Kostka, miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Agentes de Viajes, indicó que regir el estado de emergencia, la limitación de movimiento y el cierre de fornteras, se trata de una situación extraordinaria que no dispone de una base jurídica específica, al tiempo que las agencias de viajes no están aseguradas para casos de pandemia. En caso de que esta situación extraordinaria se prolongue por varios meses puede llevar a la bancarrota a muchas agencias, indicaron desde la Asociación de Agencias de Viajes.