El guitarrista David Doruzka se identifica con el jazz
Su primer álbum titulado Hidden Paths, o sea, "Caminos ocultos", lo grabó en Nueva York hace dos años y el disco tuvo gran éxito. En la República Checa actúa en clubes, iglesias, salas de concierto y colabora con la Radiodifusión Checa. El guitarrista checo David Doruzka se identificó con el jazz a sus trece años de edad y ese género musical sigue siendo hasta hoy una de las mayores inspiraciones de su vida.
El indiscutible talento musical de David Doruzka era evidente desde su temprana edad. Doruzka nació en Praga en 1980 y a sus diez años comenzó a tocar la guitarra. Fue el jazz el género musical que cautivó al joven músico y a partir de sus catorce años actuaba con destacados músicos de jazz checos, entre ellos, Karel Ruzicka y Jaromír Honzák. Entre 1999 y 2002 el joven músico checo estudió composición e improvisación musical en Estados Unidos, en el Berklee College of Music, en Boston.
Al hablar de David Doruzka, los especialistas afirman que desde hace tiempo el jazz checo no ha tenido a un músico tan fenomenal. En 1995, antes de cumplir sus quince años de edad, Doruzka fue ganador del premio "Talento del año" concedido por la Sociedad Checa de Jazz.
El primer álbum del joven músico checo, titulado Hidden Paths y grabado en Estados Unidos, obtuvo el premio "Angel 2004" de la Academia Checa de Música Popular, en la categoría de jazz y blues. En ese álbum David Doruzka se presenta como intérprete y también como compositor de siete temas musicales.
Desde hace algún tiempo, el joven guitarrista checo actúa con el Josefine Lindstrand Quartet, elenco internacional que lleva el nombre de una de sus integrantes, la cantante sueca Josefine Lindstrand. Son miembros del cuarteto, además, el baterista polaco, Lukasz Zyta y el contrabajo checo, Jaromír Honzák. El conjunto cosecha éxitos en la República Checa, así como en el exterior. Su próximo álbum David Doruzka quiere grabarlo precisamente con este elenco.
Como solista o como miembro de algún grupo musical, David Doruzka ha actuado hasta el presente en muchos países, entre ellos Estados Unidos, Canadá, Austria, España, Portugal y Suecia.
"Trato de identificarme con los temas que interpreto, porque sólo así el espectador puede llegar a creer en mis sinceros sentimientos con respecto a la música. Para ser un buen músico no es suficiente dominar a la perfección la técnica de la interpretación. La música hay que sentirla, hay que creer en ella", afirma David Doruzka.