Ministerio de RR.EE. crea Departamento para respaldar a las fuerzas democráticas que se enfrentan a los regímenes totalitarios
La República Checa anunció que respaldará a los disidentes que luchan contra los regímenes totalitarios. El Ministerio de Relaciones Exteriores creó un Departamento que se dedicará a la lucha contra el totalitarismo.
El trabajo del nuevo Departamento del Ministerio de Relaciones Exteriores checo consistirá, entre otras cosas, en ayudar a los movimientos democráticos que sufren en carne propia limitaciones y restringciones impuestas por los regímenes totalitarios.
La República Checa ayudará en programas para la publicación y financiación de "samizdat", o sea materiales sobre el respeto de los derechos humanos y que denuncien las arbitrariedades de los regímenes totalitarios, impartirá también cursos para personas que empiezan a vivir en libertad, para el periódo de transición del totalitarismo a la democracia.
Según explicara Gabriela Dlouhá, jefa del nuevo Departamento, la República Checa tiene una política exterior muy clara en la que se hace énfasis al respeto de los derechos humanos.
"La idea de crear este Departamento es muy antigua, ya que en la República Checa, que vivió bajo un régimen totalitario, la solidaridad con las fuerzas democráticas y pro derechos humanos son temas de mucha relevancia".
Muy estrechamente con el nuevo Departamento del Ministerio de Relaciones Exteriores checo cooperarán organizaciones no gubernamentales, como por ejemplo "Hombre en Emergencia", con mucha experiencia en programas de ayuda humanitaria.
Entre las prioridades del programa de ayuda a las fuerzas democráticas se encuentran países como Irak, Bielorrusia y Cuba.
"Cuba representa para la República Checa una de sus mayores prioridades. Es sabido que Praga mantiene una política muy clara y firme en torno a la situación de los derechos humanos en Cuba. Tanto el ex presidente Václav Havel como el ministro de RR.EE., Cyril Svoboda, han expresado en reiteradas ocasiones su apoyo a las fuerzas democráticas cubanas".
Se estima que en el futuro el Departamento de la Cancillería checa podría llegar a convertirse en una agencia especializada como las que funcionan en otros países europeos.
