El grupo Marcipán provoca a los fundamentalistas folklóricos

El grupo Marcipán, foto autora

El grupo Marcipán es más que un simple grupo folklórico. El amplio espectro de estilos, colores musicales y, sobre todo, la gran emotividad hace de este conjunto algo especial en el escenario musical checo.

El grupo Marcipán,  foto autora
El grupo Marcipán debutó el año pasado con el disco "Cuánto azúcar, tantas almendras", que llamó la atención de la crítica y del público por sus interpretaciones sumamente vivas y originales de la música folklórica checa y morava.

Marcipán lo integran cinco miembros que se dedican paralelamente a otros géneros musicales entre la música clásica y el rock, dijo el líder del Grupo, Jirí Hodina, quien se desempeñara por muchos años en el conjunto vocal Schola Gregoriana Praguensis.

"Con frecuencia me preguntan cómo logré esta simbiosis inequívoca de músicos de tan diversos intereses. Respondo que será porque todos los miembros del grupo se dedicaban en el pasado a la música folklórica".

El repertorio de Marcipán parte de los raíces del folklore checo y moravo, sin embargo, encontrar la definición exacta de su música resulta un tanto difícil, destacó Jirí Hodina.

"La crítica y los musicólogos tampoco logran ubicarnos en un determinado género. Diría que nuestra música oscila entre el folklore, la "world music" y algo específico que aporta cada miembro. Lo definiría como folklore urbano".