Una de cada cinco checas embarazadas fuma
En la República Checa una de cada cinco mujeres embarazadas fuma. Y ello a sabiendas de que el tabaco puede afectar su salud y lo que es peor, la salud de su bebé. Según los médicos, si una madre fuma durante el embarazo puede perjudicar el desarrollo físico, mental e incluso social de su hijo. Por eso, se recomienda, entre otras cosas, que las mujeres dejen de fumar al menos un año antes de planear su embarazo.
Según Verónica, madre de gemelos y que fumó durante casi todo su embarazo, temía que sus hijos tuvieran problemas al nacer.
"Al séptimo mes de embarazo le pregunté a mi ginecólogo si debía dejarlo. El me respondió que si ya había fumado los primeros meses, no tenía sentido dejarlo. Que mi cuerpo no se alcanzaría a limpiar en esos dos meses que quedaban de embarazo. Sin embargo, decidí dejarlo. Al menos en ese período llevé una vida saludable y seguramente se redujeron los riesgos de que mis hijos tuvieran problemas al nacer", explicó Verónica.
Según estudios realizados por la Universidad Carolina de Praga, las madres de la mitad de los niños que fallecen súbitamente han sido fumadoras en algún momento. Aquellos niños fallecen principalmente porque paran de respirar. Esa enfermedad se conoce como apnea. Si una mujer fuma durante la segunda mitad de su embarazo, daña ciertos receptores cerebrales del feto que son capaces de iniciar nuevamente la respiración en caso de que el bebé pare de respirar.