Moravia se está ahogando
La prensa nacional ofrece noticias principalmente acerca de las inundaciones que siguen azotando Moravia, informa que los médicos checos no piensan presentar una renuncia colectiva, según les proponen los sindicalistas, y habla del interés que ha mostrado una ciudad china por adquirir el pabellón checo, una vez terminada la Expo 2010.
“Moravia se está ahogando”, “Las inundaciones están aniquilando Moravia del Norte”, “En Moravia se producen las peores riadas en los últimos cien años”, bajo estos titulares la prensa checa informa sobre las inundaciones que están afectando estos días Moravia, al este del país.
Los diarios nacionales indican que los desbordamientos se han cobrado la vida de una mujer de 69 años de edad, que murió ahogada en la ciudad Třinec, y que en numerosas regiones moravas ha sido declarado el tercer grado de alerta, debido a las intensas lluvias.
Los pronósticos dicen que Moravia tendrá que soportar el temporal hasta el viernes y que en los próximos días se esperan fuertes precipitaciones también en Bohemia, donde crecerán los caudales de los ríos, aunque no deberían desbordarse, escribe Právo.
Los médicos checos pasan por alto el llamamiento sindicalista de presentar una renuncia colectiva en caso de que los hospitales no les suban el sueldo, menciona Mladá Fronta Dnes.
La Asociación Sindicalista de Médicos (LOK) espera que miles de empleados se sumen al llamamiento, pero según un sondeo realizado por el periódico, sólo una organización sindicalista, de los veinte hospitales encuestados, ha confirmado que apoyará la iniciativa.
Los chinos están interesados en comprar el pabellón checo de la Expo 2010 de Shanghái, indica Lidové Noviny.
Una ciudad china, situada cerca de Shanghái, ha mostrado interés por adquirir el pabellón para su posterior uso comercial, confirmó el comisario general de la exposición checa, Pavel Stehlík, sin dar a conocer el nombre del municipio.
Al llevar a cabo la venta, la República Checa cubrirá gran parte del costo de su participación en la Expo. Sin embargo, el pabellón puede ser vendido al exterior sólo en caso de que ninguna institución estatal checa muestre interés por adquirirlo, según reza la ley, detalla el diario.