Milos Zeman y Jorg Haider siguen retándose

Milos Zeman, Foto: CTK

El primer ministro checo, Milos Zeman, no recibió ayer miércoles al embajador austríaco, Klas Daudlebsky, que quería transmitirle que Austria rechaza las críticas de Zeman al Partido de los Libres y a su dirigente Jorg Haider, tachados por Zeman de posfascistas.

Milos Zeman,  Foto: CTK
La ministra de Relaciones Exteriores de Austria, Benita Ferrero-Waldner, ordenó al embajador Klas Daudlebsky transmitir oficialmente en Praga que Austria rechaza las declaraciones de Milos Zeman sobre el Partido de los Libres como una injerencia en sus asuntos internos. Para entregar la protesta de su gobierno, el embajador Daudlebsky se desplazó a la ciudad de Ústí nad Labem, en Bohemia del Norte, donde sesionaba el Ejecutivo checo. El primer ministro Milos Zeman no recibió a Daudlebsky, pero mandó decirle que estaba dispuesto a entrevistarse con él a principios de la próxima semana cuando regrese de Yugoslavia. El embajador austríaco pudo finalmente entregar la nota de protesta al canciller checo, Jan Kavan. Éste declaró textualmente: "Hemos coincidido en no crispar más la situación".

Sin embargo, Zeman y Haider siguieron retándose.Al término de la reunión del gobierno checo Milos Zeman reiteró ante los periodistas su postura hacia el Partido de los Libres y su ex presidente Jorg Haider a quien volvió a llamar posfascista. Zeman resaltó que considera a Haider como el Chernóbil político.

Jorg Haider,  Foto: CTK
Jorg Haider a su vez afirmó en la televisión austríaca que Zeman es un comunista y que se sentiría ofendido si el primer ministro checo se disculpase un día ante él por sus declaraciones.

Entretanto, el referéndum contra la central electronuclear checa de Temelín, que se celebra en Austria por iniciativa del Partido de los Libres de Jorg Haider, suscita críticas en la Unión Europea. El comisario para la ampliación, Gunter Verheugen, opina que Haider chocará con su plebiscito anticheco.