Medio ambiente tras 89: Menos contaminación industrial, pero más gases de invernadero

Unipetrol

La República Checa registra desde el año 1989 un descenso meteórico de la contaminación ocasionada por la industria. Por otro lado, vienen creciendo las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas del transporte.

Tras Luxemburgo e Irlanda, la República Checa es el país de la Unión Europea donde más han aumentado las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes del transporte. Mientras que en 1990 el transporte produjo el cinco por ciento de las emisiones de dióxido de carbono, en 2006 fue el 13 por ciento. Así lo indica la Agencia Checa de Medio Ambiente Cenia en su nueva publicación sobre la influencia de la economía en el medio ambiente de la República Checa tras el año 1989.

Jan Mertl, uno de los autores del informe, apunta al respecto que a principios del siglo XXI asume la responsabilidad por el medio ambiente el ciudadano.

“Se trata, ante todo, de los hogares, qué tipo de calefacción usamos, si ahorramos energía eléctrica. También se refiere a nuestros hábitos en el transporte, con qué frecuencia viajamos en coche, cuál es el estado de los vehículos. Hoy, el medio ambiente está más en manos de los individuos que en las de las grandes empresas industriales”.

Lo cierto es que la industria contamina el medio ambiente en la República Checa mucho menos que hace 20 años. Por ejemplo, las emisiones de dióxido de azufre han disminuido desde 1989 en un 90 por ciento. Según Jan Mertl, la tendencia positiva se debe a la mejora de las tecnologías, de la legislación y su aplicación.

Foto: Comisión Europea
“En esa época poca gente se interesaba por la protección del medio ambiente. El tema se pasaba por alto y la situación real del medio ambiente incluso se ocultaba, así que las empresas no tenían motivación para mejorar sus parámetros medioambientales. Actualmente, el medio ambiente es uno de los temas primordiales tanto a nivel político como en los medios de comunicación. Para las empresas la atención a la protección del medio ambiente está vinculada con la competitividad”.

Jan Mertl agrega que la República Checa ha logrado solucionar las cargas ecológicas del pasado comunista, pero aparecen nuevos problemas. Últimamente aumentan las emisiones de gases de efecto invernadero. A las tradicionales empresas químicas, siderúrgicas y centrales eléctricas, se han sumado nuevas contaminadoras en el sector del procesamiento de madera, producción de materiales aislantes y plásticos. El medio ambiente sufre también por los cambios del paisaje provocados por la construcción masiva de viviendas y zonas industriales.