Meda Mládková, la mecenas que luchó por el arte checoslovaco
La coleccionista de arte y fundadora del Museo Kampa de Praga, Meda Mládková, cumplió 100 años. Su vida la conmemora la exposición “Meda, Embajadora del Arte”.
Gran coleccionista, historiadora, administradora, amante de los animales, pero sobre todo mecenas del arte. Hablamos de la checa Meda Mládková, quien cumplió 100 años este fin de semana.
Mládková pasó más de la mitad de su vida en el exilio. En 1968 logró llevar a Estados Unidos una colección de arte desde detrás de la Cortina de Hierro. Después de la Revolución de Terciopelo de 1989 regresó a Checoslovaquia y donó la colección entera al Estado, contribuyendo de manera significativa a la conservación y promoción del arte checoslovaco.
Cientos de personas se unieron a la celebración de su cumpleaños que tuvo lugar en el patio del Museo Kampa. Mládková no asistió personalmente al evento, debido a una fractura de cadera, pero siguió los discursos detrás de una de las ventanas del edificio.
Entre las personas que le rindieron homenaje estuvo el actor y artista Theodor Pištěk. Mládková ayudó a exponer su arte en Estados Unidos, en la los tiempos cuando estaba prohibido presentarlo en Checoslovaquia.
“Meda Mládková significa mucho para mí. Hay personas que aprecio, pero luego hay otro grupo de personas por las que tengo cariño. A este segundo grupo pertenece la señora Meda”.
A las felicitaciones se unió también el escultor y artista Stanislav Kolíbal, quien recordó su primer encuentro con la mecenas.
“Nos conocimos en 1969 en Praga, en la inauguración de una exposición de pintura moderna estadounidense. A partir de entonces, Meda empezó a interesarse por mi arte. A veces Meda no podía venir a Praga, y a veces yo tenía prohibido vender mi arte aquí”.
Mládková nació el 8 de septiembre de 1919 en Zákupy, en el norte de Bohemia. En su juventud bailó en cabarets en Lituania y Austria. Después de la Segunda Guerra Mundial se fue a Suiza.
En Ginebra estudió economía y trabajó para la revista Actualidad. En la década de los 50 vivió en París, donde estudió historia del arte y posteriormente fundó la primera editorial checa en el exilio, Editions Sokolova. Gracias a su estancia en París conoció a su futuro esposo, Jan Mládek, uno de los fundadores del Fondo Monetario Internacional, con quien más tarde viajó por el mundo, adquiriendo obras de arte hasta entonces desconocidas.
En la metrópoli francesa, Mládková conoció al destacado pintor František Kupka, como confió hace un tiempo a la Radio Checa.
“Cuando vi las pinturas de Kupka, estaba emocionada. Pocas veces en la vida se siente una emoción tan fuerte. Las pinturas costaban unos cincuenta o cien dólares en este entonces, por lo que podía permitírmelas. Compré una pintura ese mismo día y me la llevé a casa”.
En 1960 Mládková se mudó a Washington. En su casa estadounidense se reunían políticos, artistas e intelectuales de todo el mundo, entre ellos la ex Secretaria de Estado de EE.UU., Madeleine Albright, o el ex presidente checoslovaco, Václav Havel.
A partir de 1967 empezó a retornar a Checoslovaquia. A través de actividades regulares apoyó a artistas que no podían exponer su arte libremente. Ella misma compró muchas de las obras para su colección privada.
Después de la Revolución de Terciopelo de 1989 se mudó a Checoslovaquia y fundó el Museo Kampa, que alberga obras de su colección. El artista Kolíbal estuvo presente en el momento de la fundación, como recordó para la Radio Checa.
“Recuerdo que me llevó al barrio de Karlov para ver las propiedades. Yo le recomendé el sitio donde está el actual Museo Kampa, es por eso que nos podemos reunir aquí este día”.
La fundación del museo fue acompañada de una gran disputa con las autoridades sobre el aspecto del edificio. El museo no se abrió hasta 2003.
En 1999, el entonces presidente checoslovaco, Václav Havel, le otorgó a Meda Mládková la Medalla del Mérito. Más tarde recibió la Orden Nacional del Mérito francesa, uno de los premios más altos del país.