Los padres no saben qué hacen sus hijos en Internet

Фото: geralt Pixabay/CC0

El 97% de los niños y adolescentes checos usa su celular para acceder a Internet, según un estudio publicado por la agencia EU Kids Online.

Foto: geralt,  Pixabay,  Pixabay License

El conectarse por medio del teléfono móvil a Internet es una costumbre cotidiana en Chequia de casi todos los menores de entre 9 y 16 años. En términos porcentuales se trata del 97% de los niños y adolescentes, mientras que en 2010 era apenas un 37%.

Foto ilustrativa: Lupuca via Foter.com / CC BY-SA
El apego a los celulares y a Internet va creciendo, convirtiéndose éstos en la actitud que más tiempo quita a niños y adolescentes contemporáneos. Los menores los utilizan tanto para jugar online como para contactar con amigos a través de las redes sociales. Esto se debe sobre todo a la forma más fácil de acceso a Internet, de acuerdo con David Šmahel, de la Universidad Masaryk de Brno, uno de los autores de un reciente estudio de la EU Kids Online que se centró en el tema.

”En 2010 los niños accedían a Internet a través de ordenadores o computadoras portátiles y con mayor frecuencia había sólo uno de esos dispositivos en la familia. Actualmente la aplastante mayoría de los menores tiene su propio celular con posibilidad de conectarse a Internet”.

El estudio, en el que fueron incluidos más de 2800 menores de toda la República Checa, revela que aproximadamente el 25% de los menores pasan más de cuatro horas diarias conectados a Internet.

Otro aspecto que interesó a los autores del estudio sobre el acceso de los menores a Internet por medio de los celulares, como señalara David Šmahel, fue si los padres controlan las actividades a las que se dedican sus hijos en Internet.

Foto ilustrativa: natureaddict,  Pixabay,  Pixabay License
”Sólo el 15% de los niños que hemos entrevistado dijeron que sus padres los controlan con frecuencia. En el caso de otro 27% de vez en cuando, y casi el 60% de los menores respondieron que sus padres no lo hacen nunca o casi nunca, lo que son cifran porcentuales muy altas”.

Šmahel considera que el motivo principal del insuficiente control por parte de los padres es que éstos probablemente tengan un menor nivel de conocimiento de las tecnologías modernas que sus hijos.

“En parte se debe al hecho de que muchos padres no tienen teléfonos inteligentes, pero a sus hijos sí se los compran. Algunos tampoco tienen conocimientos más profundos de cómo funcionan Internet y las tecnologías digitales”.

Los científicos analizaron asimismo las actividades a las que se dedican los niños con mayor frecuencia cuando están en línea. El 75% siguen vídeos, lo que significa que a esta actividad se dedica alrededor de un 40% de menores más que hace ocho años. El 85% juegan online y uno de cada cuatro colegiales aprovecha Internet en su móvil para hacer las tareas escolares.