Los matones de ČEZ, esclavitud moderna y Kundera reivindicado
Escándalo en el gigante checo de la energía, ČEZ, por el adiestramiento tipo militar de sus empleados para enfrentar a clientes conflictivos. Además, la explotación de trabajadores de Rumania y Bulgaria, la reconciliación de Milan Kundera con su ciudad natal, Brno, y el festival ‘La Película’ de cine español.
La empresa energética ČEZ se ha visto envuelta esta semana en un turbio escándalo debido a un video que vio la luz pública, en el que se ve a sus empleados de la unidad antirrobo recibir entrenamiento de guerrilla.
Otro video dado a conocer muestra cómo un cliente acusado de robo y perseguido por inspectores de ČEZ es empujado al suicidio.
ČEZ niega que sus empleados hayan actuado mal o se hayan sobrepasado en sus tareas. El portavoz de la compañía, Martin Pavlíček, incluso justifica que los miembros de la sección antirrobo tengan adiestramiento paramilitar.“Estamos totalmente convencidos, y tenemos documentado, que nuestros empleados a menudo se enfrentan a situaciones de agresión: les atacan con armas, les azuzan perros, alguna vez incluso les han disparado. Y gracias a esta formación, estas situaciones no acabaron en tragedia”.
El Consejo Checo de Helsinki, una asociación para la defensa de los derechos humanos, considera las prácticas de ČEZ como punibles por ley y absolutamente injustificables, como comenta su presidenta, Anna Šabatová.
“Para encargarse de estos casos están las Fuerzas de Seguridad. Las personas que se enfrentan a estas situaciones deberían ir preparadas para otro tipo de intervención: autocontrol y trato educado con el cliente. Y si esto no funciona pues deberían retirarse y utilizar otros medios. Y esto lo debe hacer únicamente el Estado, no personas privadas”.Los videos difundidos, así como diversas fotografías, han salido a la luz pública de mano del abogado Jan Rytíř, que representa a varios clientes de ČEZ perseguidos por la llamada División de Pérdidas No Técnicas.
La nueva esclavitud tiene rostro en Chequia. Se trata de ciudadanos de la Europa más pobre, específicamente, de Bulgaria y Rumania.
En los últimos años las bandas organizadas han preferido como mano de obra barata a búlgaros y rumanos, en vez de ucranianos o vietnamitas, porque así sacan partido de la libertad de tránsito entre países de la Unión Europea.
Tatiana Mandíková, trabajadora social de la Asesoría checa para Extranjeros y Refugiados, explica que la crisis ha empujado a los inmigrantes a depender de las mafias, que se han visto fortalecidas.“Lo peor es para los que por la crisis se han quedado sin trabajo legal y se han visto obligados a entrar en el mercado negro laboral, que es enorme, para sobrevivir. La mayor parte están en la construcción, sin seguro, ni un sueldo asegurado. De contratos no se puede ni hablar”.
Quienes han caído en las redes del crimen organizado, están coaccionados de manera que no denuncian su situación ni vuelven a su país. Allí deben dinero a familiares y amigos que les ayudaron para buscar el futuro en otro lugar.
Por estas razones, Lucie Sládková, directora de la Organización Internacional para la Emigración, cree que tiene que ser el Estado el que tome la iniciativa en la lucha contra la explotación laboral.
“Precisamente porque es muy complicado de demostrar que se es víctima del abuso por parte de estos grupos y porque los extranjeros no se quejan ante las autoridades, todo esto ocurre sin levantar demasiado interés de las instituciones”.La unidad de Investigación del Crimen Organizado advierte de que en la explotación de rumanos las bandas organizadas más activas son principalmente de ucranianos.
Precisamente tres ciudadanos de ese país se enfrentan a penas de hasta 15 años de cárcel tras el desmantelamiento de una red organizada que operaba en el norte del país.
Aunque algún sector de la prensa checa lo haya crucificado sin esperar siquiera una confirmación a las serias acusaciones en su contra, parece que la reconciliación de Milan Kundera con su país avanza.
O al menos la reconciliación con su ciudad natal, Brno. El alcalde mayor de Brno, Roman Onderka, entregó en París la ciudadanía de honor al escritor, la mayor gloria literaria checa.
Se trata de la más alta distinción que Brno puede entregar a sus ciudadanos. El gesto se produce cuando aún humea la polémica sobre Kundera por su supuesta delación en 1950, lo que tiene sin cuidado al alcalde Onderka.
“En primer lugar tengo que decir que esta distinción es de las mayores que la ciudad de Brno puede otorgar. Solo se entrega cada cuatro años. No sé si todos los concejales de la alcaldía la consideran como una muestra de apoyo y de confianza en defensa de Kundera, pero por mi parte sí lo es, sin duda”.
En París, donde reside desde 1975, Kundera recibió con mutismo la distinción. Se trata de un silencio que mantiene desde hace tiempo y que no ayuda en nada a mejorar la relación con la prensa de su país.
Cintas españolas, pero también dos sudamericanas, entre ellas la candidata peruana al Oscar ‘La Teta Asustada’, darán vida al festival ‘La Película’, que a contar del 16 de febrero próximo se celebrará en Praga y Brno.
La Embajada de España en Chequia, que organiza este encuentro fílmico, sostuvo a través de su consejero cultural, Álvaro Díaz Duque, que el interés del público checo por el cine en español va en aumento.“Creo que el éxito de las últimas ediciones de ‘La Película’, y en concreto de la del año pasado, con más de cuatro mil espectadores, demuestra el creciente interés del público checo por la cultura y la cinematografía hispana”.
Díaz Duque cree que los 15 largometrajes seleccionados para la quinta edición del festival hacen justicia a la producción cinematográfica de su país.
“La programación de este año incluye una quincena de largometrajes, la mayor parte realizada en los dos últimos años, que nos permite hacernos una idea de la riqueza temática y artística de la producción cinematográfica española reciente. Incluyendo desde grandes éxitos, como ‘Los Girasoles Ciegos’ y ‘Camino’, hasta propuestas más minoritarias quizás, pero también de gran interés”.
Desde el 16 al 21 de febrero el festival ‘La Película’ se celebrará en Praga, en el cine Světozor. Después, del 22 al 28 de febrero, se trasladará a Brno, al cine Art.
Entre las cintas que destacan este año figuran ‘Camino’, de Javier Fesser, ganadora del premio Goya a la mejor película española en 2009, y ‘Retorno a Hansala’, de Chus Gutiérrez, que toca el sensible tema de la inmigración ilegal.