Los editores checos de e-books son optimistas a pesar de las dificultades del mercado
A los libros electrónicos les ha costado encontrar un sitio en el mercado editorial checo como consecuencia de los impuestos, de la piratería y de la cautela de algunos de los editores más tradicionales. Sin embargo, los optimistas confían en que el libro digital aún puede ganar posiciones en el sector editorial checo.
Fraus media, una editorial que ha ganado varios premios por sus libros de texto utilizados en las escuelas checas, empezó a producir los mismos contenidos en formato electrónico, pero actualmente sus ambiciones han aumentado. El director del proyecto, Antonín Chadima, alberga buenas expectativas, sobre todo teniendo en cuenta que la editorial ofrece alrededor de 3.000 obras para libros electrónicos y puede presumir de hacer 200.000 ventas al año.
“El género de ficción, libros de suspense y la trilogía erótica ‘Cincuenta sombras de Grey’ ha sido lo más vendido en el mercado del libro electrónico. Nuestra editorial tiene mucho éxito en la venta de libros de texto para las escuelas, lo cual representa el 10% de nuestros beneficios. Pero nos gustaría entrar en el mercado de libros normales, de no ficción.”
En cierto modo, el formato del libro digital tiene más prestaciones con los libros de no-ficción que con los de ficción gracias a las aplicaciones interactivas como vienen a ser la voz o el vídeo, que se integran en el libro electrónico para proporcionar detalles adicionales. El problema es que la añadidura de estos elementos incrementa el precio del libro.Por el momento, de acuerdo con Chadima, los costes de publicar libros convencionales y libros electrónicos son más o menos los mismos. El papel representa tan sólo el 10% de los costes de publicar un libro, por lo que el hecho de que los libros electrónicos no usen papel no representa un gran ahorro.
Hay varias razones que explican la lenta integración de los libros electrónicos en el mercado checo. Una de ellas es el hecho de que los libros, tanto de papel como los electrónicos, no disfruten durante los últimos años de IVA reducido.
El otro gran problema del e-book en la República Checa es la piratería. Y es que la descarga gratuita de libros por Internet se ha empezado a extender en el país. De hecho la República Checa tiene una tasa de piratería superior a la de Rusia, uno de los países con mayores índices de descargas ilegales. Sin embargo, Antonín Chadima tiene soluciones para afrontar este obstáculo.“Si le damos al cliente la opción de comprar libros a precios muy bajos o a través de una suscripción anual y además le organizamos los libros en categorías y en formatos sencillos, el cliente los comprará. Pero consecuentemente tendremos que poner publicidad para obtener dinero. Otra posibilidad es vender libros interactivos que no sean tan fáciles de copiar”.
Uno de los factores que da esperanzas a los partidarios del libro digital es el hecho que sus mayores clientes sean personas jóvenes. Un factor muy importante, puesto que la juventud es la futura clientela de las editoriales.