Los checos no piensan en tener dinero de reserva

Foto: Barbora Němcová

El presupuesto de un tercio de los checos terminó en cifras negativas en 2016, y son pocos los ciudadanos que ahorran.

Foto: Barbora Němcová
Un reciente estudio del Banco Comercial Checoslovaco reveló que la mitad de las familias checas no puede permitirse pagar gastos inesperados de más de 380 euros. Y si uno de los cónyuges perdiera el trabajo, una cuarta parte de las familias no aguantaría ni un mes sin pedir un préstamo.

Independientemente de que la República Checa registra un positivo desarrollo económico, a una tercera parte de los hogares checos le faltó dinero el año pasado y se vieron obligados a pedir un préstamo. Los expertos indican que la causa de esta situación radica en los relativamente bajos salarios en combinación con una mala planificación financiera de las familias checas.

Una considerable parte de los ciudadanos no admite la importancia de tener una reserva financiera, o ésta es mínima, y tampoco reconocen la necesidad de planificar el presupuesto familiar, afirma el economista y consejero financiero David Šmejkal.

Los expertos advierten que todo comienza dentro de la familia, e insisten en la importancia de la educación financiera de los niños desde una temprana edad, y también como asignatura obligatoria en las escuelas.

Los niños deben aprender a administrar el dinero, saber lo que es un presupuesto familiar, cuáles son los mayores gastos de una familia, y cómo se gana el dinero, para prevenir situaciones que enfrentan actualmente muchos padres de familia, insiste Šmejkal. En el caso de los adultos, añade, cada persona debería tener una cierta reserva financiera desde que empieza a trabajar.