La confianza de los checos en las criptomonedas se resiente
Los checos invirtieron entre enero y mayo de este año unos 77 millones de euros en criptomonedas, un 40% menos que en el curso anterior. La gran caída de su cotización se perfila como el gran responsable.
Los activos digitales son ya todo un fenómeno en nuestros tiempos. Destaca poderosamente el caso de las criptomonedas, un sector que experimentó un boom insospechado hasta alcanzar en muchos casos valores históricos pero cuya tendencia actual parece desalentar cada vez más a los inversores en clave nacional.
Los últimos datos presentados por Bit.plus, mayor comerciante del país, dan buena cuenta de ello, evidenciando que el interés de los checos en las criptomonedas disminuye: este año, desde principios de enero hasta finales de mayo, los checos compraron criptomonedas por valor de unos 77 millones de euros, hasta un 40% menos que en el mismo período del año pasado.
"Bitcoin atrajo a nuevos inversores en mayo. Su precio se mantuvo en un rango bastante estrecho de alrededor de 28 000 euros durante todo un mes. Por lo tanto, los temores de otra fuerte caída no se confirmaron, sin embargo, no se espera que se alcancen máximos históricos en el futuro cercano”, afirmó Martin Stránský, director y fundador de Bit.plus.
Este desplome en la cotización de las propias criptomonedas, por su parte, se perfila como el gran responsable de la pérdida de confianza de los inversores.
Bitcoin, la primera y más importante criptomoneda, alcanzaba en noviembre del pasado año máximos históricos hasta superar los 65 000 euros, mientras que su cotización actual es de poco más de 28 000.
"Es como un columpio con las criptomonedas. Cuando suben, todos están emocionados, los artículos de los medios son positivos y optimistas. Pero tan pronto como cae su valor, todos entierran el mercado de las criptomonedas ", señaló Martin Tremčinský, antropólogo social y economista de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Carolina, ante los micrófonos de Radio Wave.
Según Tremčinský, la volatilidad representa uno de los grandes riesgos a tener en cuenta en este mercado. Además, por norma general, los ciudadanos se ven cautivados por la popularidad de estos productos, convertidos casi ya en una suerte de moda, debido a su fácil acceso y la creencia, muchas veces errónea, de que les reportarán grandes beneficios en poco tiempo.
"La regla básica de la inversión es que uno debe invertir dinero que pueda permitirse perder. A menudo se alienta a las personas a invertir su dinero a toda costa, de lo contrario, serán consumidos por la inflación. Al mismo tiempo, existe la creencia generalizada de que las personas necesitan orientarse en las inversiones y comprenderlas. Pero a menudo no está en nuestro poder", afirmó Tremčinský.
