Jefe de la diplomacia checa presentará al Gobierno informe sobre la situación en el aeropuerto de Praga

El aeropuerto de Praga

Los controles a los ciudadanos checos que viajan a Inglaterra por parte de los agentes de Migración británicos, en el aeropuerto de Praga, siguen agitando el escenario político checo. El ministro de Relaciones Exteriores, Jan Kavan, presentará al Gobierno un informe sobre la situación en el aeropuerto. También el presidente de la República, Václav Havel, se expresó al respecto.

Los agentes de Migración británicos permanecerán en el aeropuerto de Praga por lo menos hasta finales del mes en curso. Tras entrevistarse con representantes de la etnia gitana, el jefe de la diplomacia checa, Jan Kavan, dio a conocer que elaborará para el Gobierno un informe en el que evaluará si las autoridades británicas han cometido actos de discriminación contra los gitanos checos.

En su primera sesión después de las vacaciones, el próximo día 22, el Gobierno de Milos Zeman deliberará sobre el informe y decidirá sobre las siguientes medidas a tomar. Kavan admitió que si se confirman casos de discriminación, propondrá al Gobierno la anulación de los controles.

En esto confía el presidente de la Unión Internacional Romaní, Emil Scuka:

"Somos optimistas; confiamos en que el Gobierno checo suspenderá dichos controles y no permitirá que nadie en el territorio nacional, ni los agentes de Migración británicos, discrimine a los ciudadanos."

El ministro de Relaciones Exteriores checo se reunió asimismo con la

Vaclav Havel
presidenta de la filial checa del Comité de Helsinki, Jana Chrzová, con la que acordó que dicho ente monitoree la situación en el aeropuerto de Praga.

También el presidente de la República, Václav Havel, comentó por primera vez, este martes, los controles, calificando de inquietantes varios aspectos. Havel subrayó que hay que respetar los derechos humanos y el derecho a la protección de datos personales. "Si el procedimiento de los agentes de Migración británicos violara estos derechos, sería inaceptable para mí que permanecieran en el aeropuerto," puntualizó Havel.