Europa League: el silencio tumba al Pilsen frente al Fenerbahce

Foto: ČTK

Un tremendo fallo del capitán del Viktoria Pilsen, Pavel Horváth, fue decisivo para el partido de vuelta de los octavos de final de la Europa League entre el equipo checo y el Fenerbahce. El partido disputado este jueves en Estambul, que terminó con un empate a uno, envió a cuartos a los turcos que se impusieron por un resultado global de 2-1.

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El partido de vuelta de los octavos de final de la Europa League entre el Fenerbahce y el Pilsen se jugó a puerta cerrada, debido a los disturbios provocados por la hinchada turca en la fase anterior.

Los checos evitaron así la infernal atmósfera que suele reinar en el estadio Şükrü Saraçoğlu. Pero en vez de ser una ventaja, el ambiente silencioso resultó ser letal para los cerveceros.

En el minuto 43, el capitán Pavel Horváth se fió de un aviso lanzado por uno de sus compañeros que le aseguraba que podía jugar tranquilo en el área grande. En vez de despejar de una vez, el centrocampista intentó controlar el balón, cuando Salih Ucan se lo robó para colocarlo en la red.

Si hubiera habido ruido en el estadio, no habría oído nada y despejado el balón sin compromiso. Con esas palabras se arrepintió Horváth una vez terminado el partido.

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“Fue un fallo en la comunicación. Alguien me gritó: ¡solo!, como que no había contrincantes cerca de mí. Pero ha sido un error mío, debía haber despejado, en vez de obedecer. El rival me cogió de imprevisto, no me lo esperaba, es una verdadera pena”, señaló.

El Pilsen logró levantar la cabeza en el minuto 61, cuando Vladimír Darida dio la esperanza a los checos con un tiro a media distancia que terminó en la puerta de Demirel. Unos diez minutos más tarde el defensa David Limberský estrelló el balón en el palo con otro potente zapatazo desde fuera del área grande.

El desesperado esfuerzo checo de marcar el segundo y decisivo gol casi lo materializó poco antes del pitido final el guardameta Matuš Kozáčik, que se fue a apoyar la ofensiva checa en un saque de esquina lanzado por Darida. El arquero logró rematar en muy buena posición, pero el balón le rebotó en la tibia y su tiro flojo lo despejó uno de los turcos desde la línea de gol.

Pavel Vrba,  foto: ČTK
El partido terminó con un empate merecido, ya que el Fenerbahce también se creó varias buenas ocasiones para marcar. Aunque el Pilsen estuvo cerca de sorprender al favorito turco, según lamentó el técnico del Pilsen, Pavel Vrba.

“La eliminación es dolorosa. Si hubiéramos pasado a cuartos, sería un tremendo éxito. De cara a las condiciones que tenemos nosotros en comparación con equipos, como el Atlético, el Nápoles y el Fenerbahce, es satisfactorio que seamos capaces de competir con los grandes. Se ve que también en la República Checa es posible formar un equipo fuerte”, subrayó.

El Pilsen abandona la Europa League con la frente en alto. Los cerveceros lograron seis victorias, dos empates y dos veces cayeron. En la fase de grupos, los checos derrotaron en casa, entre otros, al campeón vigente, el Atlético de Madrid, mientras que en los dieciseisavos de final humillaron al Nápoles italiano con un resultado global de 5-0.

Autor: Roman Casado
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