Equipo checo de fútbol Sub 20 defeccionó, perdió y decepcionó

La selección checa Sub 20 perdió este fin de semana frente a Japón en el Campeonato Mundial de esta especialidad realizado en Argentina. Se trató de un partido con ribetes cambiantes, tanto en el primero como en el segundo tiempo. El mismo comenzó con la República Checa lanzada al ataque ante una irresoluta y confundida defensa nipona. Para mal del equipo oriental, su arquero no ofrecía garantías de seguridad. Debieron transcurrir unos 30 minutos para que Japón ensayara algún contraataque que sirviese para desnudar las falencias en la contención del medio campo checo.

Paradójicamente se seguía mostrando a un equipo checo dueño en el manejo de la pelota y de la mayor parte del campo de juego, pero también ofrecía como principal figura, casi excluyente del encuentro, a su propio arquero.

La primera etapa finalizó castigando a la escuadra checa por su displicencia y subestimación del rival. Es de destacar que en esta etapa la selección europea desarrolló un juego que en calidad resultó ir de mayor a menor, exactamente al revés que los nipones.

La segunda etapa, con el incremento del frío en la tarde noche rosarina, se presagiaba una definición aún incierta. La predisposición de los equipos en el campo de juego fue a la inversa de la del comienzo. El seleccionado japonés lanzado al ataque "dibujó" un juego de parecidas características a la de las escuadras sudamericanas. Buen manejo del balón, esquives oportunos y esperando ubicarse en lugares muy próximos a la valla rival para rematar.

No obstante, la República Checa en los primero 20 minutos y a pesar de soportar el asedio asiático, creó cuatro oportunidades netas de gol, incluyendo un penal no convalidado por el árbitro, quien además perjudicó por igual a ambos equipos tras una deficiente actuación.

Los cambios en República Checa no alcanzaron para desequilibrar en el marcador. Resultó extraño que permanecieran en dicha alineación hasta el final del tiempo reglamentario.

A pesar de los tres goles destaco la actuación del arquero checo. Japón, justo ganador, seguramente encarará próximas etapas llenas de expectativas, promisorias, positivas. La República Checa deberá corregir situaciones en su estructura mental, pensando principalmente en que a esta altura ya no hay tantos equipos débiles. Aunque no se mostraron muy preocupados cuando se retiraron del campo de juego. Tal vez les haya conformado saber que enfrentarían a Costa Rica y no a la siempre preocupante Holanda.


Autor: Juan Carlos Buscaglia
audio