El Slavia de Praga peleó valientemente por la Liga de Campeones
El equipo de fútbol checo Slavia de Praga estaba muy cerca de entrar en la prestigiosa Liga de Campeones. Los futbolistas en camisetas rojiblancas derrotaron este miércoles al club español Celta de Vigo 2 a 0 en la tercera ronda preliminar de ese torneo, pero tras caer 0 a 3 en España, el Slavia queda eliminado.
"Hemos sufrido un montón. Seguramente más de lo que esperábamos. Había un aspecto psicológico importante que era la ansiedad, porque nosotros ganamos en España 3 a 0 y perder significaría un fracaso tremendo. Si hubiésemos ganado en casa 1 a 0, seguramente el Celta hubiera jugado mejor hoy".
El Slavia empezó fenomenal y transcurridos 30 minutos marcó dos goles. Tras el primero, el banquillo del Celta protestó con tanta vehemencia que el entrenador fue expulsado a las gradas.
"Es que el línea se ha pasado. Ha pitado dos córners que no eran y en el segundo ha venido el gol del Slavia. Aparte del gol eso saca a los jugadores del campo. Yo me he equivocado en protestar, lo reconozco, lo siento, pero ese línea no está a la altura de un partido de Europa".
Aunque el Celta se vio obligado a terminar el partido con diez jugadores, tras haber sido expulsado el cerebro ruso del equipo español, Mostovoi, y a pesar del enorme esfuerzo del Slavia en los últimos minutos de la contienda, los checos no consiguieron el tercer gol para forzar la prórroga, lamentó el defensa del Slavia, Radek Bejbl.
"Jugamos tal como habíamos dicho en el vestuario. Hemos jugado muy bien, rápido y agresivo. Creo que el Celta estaba bastante nervioso. Pero, en principio de la segunda parte estuvimos un poco fuera de partido. El Celta paró nuestro juego y los últimos 15 minutos ya eran insuficientes para poder marcar el tercer gol", señaló Bejbl que en su tiempo jugó en el equipo español Atlético de Madrid.
Tras ser eliminado de la Liga de Campeones, el Slavia tiene que conformarse sólo con la participación en otro torneo europeo, la Copa de UEFA.