El opositor Partido Cívico Democrático revela su estrategia preelectoral
El opositor Partido Cívico Democrático dio a conocer en su Congreso, organizado este fin de semana, su estrategia frente a las elecciones inminentes.
"El Partido Cívico Democrático debe centrar su atención tanto en sus áreas tradicionales como en la política social, en las soluciones a la corrupción y el paro, en el sector de Salud, en las familias con niños, jubilados y desempleados. Creo que este es el mensaje de su Congreso."
El opositor Partido Cívico Democrático apostó por una reforma social de cara a los comicios del año entrante basada en tres pilares: el impuesto equitativo, la pensión de jubilación equitativa y el subsidio social garantizado por el Estado.
"Cada ciudadano checo tendrá derecho a cobrar un subsidio social para toda la vida," explicó el vicepresidente del partido Vlastimil Tlustý.
El subsidio garantizado por el Estado debería sustituir al subsidio de desempleo. Lo cobraría cada ciudadano checo con un ingreso inferior a unos 880 euros.El mayor subsidio, 200 euros, lo recibirían los desempleados, y con el sueldo creciente, el importe bajaría. El Partido Cívico Democrático asegura que su política de subsidios sociales restará un quinto del número de desempleados es decir, unas cien mil personas, durante el primer año de su aplicación.El Partido Cívico Democrático expresó también su voluntad de relevar en el poder a la Socialdemocracia.
"No es posible ser político por tu propia cuenta. La Socialdemocracia ya está cansada y ha llegado la hora del cambio. Y nosotros estamos preparados," declaró el líder Mirek Topolánek.
Según Topolánek, el Congreso ha demostrado que el Partido Cívico Democrático está unido y tiene paciencia, y además ha exhortado a los delegados a no caer en ninguna conducta indecente. El Partido Cívico Democrático se propone ganar el 36 por ciento de los votos del electorado y ha excluido de antemano la posible "gran coalición" con la Socialdemocracia.