David contra dos Goliats: ¿Encabezará el Estado checo una mujer?

Jaroslava Moserová, Foto: CTK

La lista de candidatos para la segunda elección del presidente de la República Checa está completa. En la lucha por la presidencia se enfrentarán este viernes el presidente de honor del Partido Cívico Democrático, Václav Klaus, el ex líder de los socialdemócratas, Milos Zeman, y por primera vez también una mujer - la senadora Jaroslava Moserová.

Jaroslava Moserová,  Foto: CTK
¿Quién será el sucesor del presidente Václav Havel? Los ciudadanos de la República Checa esperan con curiosidad si este viernes se dará la respuesta. Ganarse las simpatías de los diputados y senadores no será nada fácil.

¿Cuáles son las expectativas de la senadora Jaroslava Moserová, de 74 años, miembra del Consejo Ejecutivo de la UNESCO, traductora de unas cuarenta novelas policíacas del mundo hípico de Dick Francis, médica que en enero de 1969 participó en el tratamiento del estudiante Jan Palach que se autoinmoló como protesta contra la ocupación de Checoslovaquia por las tropas del Pacto de Varsovia? La candidata confía en que reciba apoyo sobre todo en el Senado y pueda influir en el resultado de la elección.

"Voy a la elección con toda resolución, y creo que pueda tener éxito en ese duelo de gigantes, yo, David contra los Goliats".

Milos Zeman,  Foto: CTK
A favor de Moserová podrían votar representantes de la Unión de la Libertad y parte del democristiano Partido Popular.

Los comunistas no presentan en la segunda elección a ningún candidato propio. Probablemente entragarán su voto al candidato socialdemócrata Milos Zeman. Al apoyo de los comunistas no renunciaría ni Václav Klaus del Partido Cívico Democrático.

"No hace falta "demonizar" el asunto. Los diputados y senadores comunistas participarán en la elección. Con sus 41 votos en la Cámara de Diputados pueden tomar las cartas en los resultados", declaró Klaus.

En caso de que el presidente de la República no saliera elegido este viernes, se celebraría la tercera elección o, después de cambiar la Constitución, podrían convocarse elecciones directas.