Cursos de baile para los adolescentes checos

Con el inicio del nuevo año comienza en la República Checa también la temporada de los grandes bailes de gala. Estos tienen larga tradición en el país, representando una de las formas de diversión más populares durante los helados meses de invierno. Varias de esas veladas están destinadas a los adolescentes, quienes tienen así la oportunidad de demostrar lo que han aprendido en los cursos especiales de baile para jóvenes, dirigidos por destacados maestros de la actividad.

Sobre el tema conversamos hoy en A Toda Marcha con el joven Vojta, vecino de Praga, estudiante de enseñanza media. ¿Desde cuando frecuentas los cursos de baile y qué se aprende ahí?, le preguntamos.

"Comencé a frecuentar los cursos de baile en noviembre pasado, después de cumplir los 17 años de edad. En estos cursos se aprenden tanto los bailes clásicos como los modernos. Y no sólo eso, sino también a comportarse debidamente en sociedad, a ser galante y educado en el trato con las representantes del sexo femenino y cosas semejantes."

Pero estas cuestiones no son muy atractivas para los jóvenes, verdad. ¿A ver, no fueron tus padres los que te obligaron a asistir a esos cursos?, le preguntamos a Vojta.

"Bien, me inscribí en los mismos en forma voluntaria, junto a un grupo de amigos, pero confieso que a mis padres les agradó muchísimo mi decisión. Ellos habían deseado que aprendiera a bailar en aquellos cursos especiales, pero justamente no querían presionarme, como suelen hacerlo a veces algunos padres en casos similares."

¿Y a ver, consideras que entre los jóvenes checos hay interés por este tipo de actividades?

"El interés por los cursos de baile es bastante amplio a mi parecer, tanto entre los varones como entre las damas. Creo que es natural que especialmente entre las muchachas la actividad goce de mayor popularidad y las chicas con frecuencia asisten a los mismos durante varios años, perfeccionando los diversos pasos y teniendo luego la posibilidad de participar en competencias de baile nacionales e internacionales. Debo confesar que después de tres meses de aprendizaje ya domino, aunque todavía no a la perfección, los bailes más simples, como el blues, por ejemplo."

¿Y qué te ofrecen a tí, personalmente, esos cursos de baile? ¿Crees, Vojta, que en la época de las computadoras y del Internet se justifican todavía similares actividades?

"Creo que siguen siendo importantes, porque considero que cada persona debería saber cómo comportarse en sociedad. Además, nos ofrecen la oportunidad de pasar una tarde en un ambiente agradable, de compartir con otros jóvenes y de entablar nuevas amistades, fuera del ambiente escolar. Aún así y a pesar de que realmente me gusta asistir a estos cursos y de que quiero aprender a bailar, personalmente prefiero la computación y el Internet."

En A Toda Marcha hemos conversado con Vojta, estudiante de Praga, sobre los cursos de baile que en la República Checa se organizan para los jóvenes de 16 a 20 años de edad.