El Consejo Económico Nacional (NERV) ha presentado su proyecto de reforma del sector de la Educación. Entre otras medidas, propone reducir de cinco a tres años los estudios universitarios necesarios para desempeñar el cargo de profesor en las escuelas básicas y secundarias del país.
Foto: Jana Šustová, Radio Prague International
La relación entre las cualidades profesionales de un profesor y su educación formal es mínima, según el Consejo Económico Nacional. Sus expertos proponen exigir la licenciatura sólo en caso de directores de las escuelas y pedagogos especiales. Para desempeñar el cargo de profesor en una escuela básica o secundaria sólo se necesitarían tres años de estudios universitarios más un curso de pedagogía, según el plan de reforma que ha presentado el Consejo.
El objetivo de esta medida es reemplazar a los licenciados con poca práctica con profesionales experimentados y así mejorar el nivel de la enseñanza, según afirma Michal Mejstřík, del Consejo Económico Nacional.
Michal Mejstřík, foto: www.vlada.cz
“Si comparamos el nivel de conocimientos de los estudiantes checos hace años y ahora, registramos una clara tendencia a la baja. Antes ocupábamos los primeros puestos de Europa en cuanto al nivel de la enseñanza, lo que ahora ya no es verdad. El mundo corre hacia delante y nosotros nos hemos quedado atrás”, opina Mejstřík.
Josef Dobeš, foto: www.vlada.cz
La propuesta del Consejo Económico Nacional va en contra de la política del ministro de Educación, Josef Dobeš. Éste invirtió cerca de 85 millones de euros para subir los sueldos de los profesores con licenciatura a partir de enero de este año. El ministro admite que las prácticas son necesarias, pero insiste en que la formación académica es igual de importante.
Foto: archivo de Radio Praga
Entre otras propuestas del Consejo Económico Nacional destaca la de intensificar la enseñanza de las matemáticas, la economía y la informática en detrimento de los idiomas y crear un sistema unificado de pruebas de calidad de las escuelas básicas y secundarias.
El Consejo no ofreció ninguna receta para curar el principal dolor de la Educación checa, que es una tremenda falta de recursos. Sus expertos coinciden en la necesidad de aumentar los sueldos de los profesores y devolverle el prestigio a su trabajo, sin embargo, por el momento no han especificado cómo conseguirlo.
