La UE multa por primera vez a Chequia
La República Checa no ha incluido a tiempo la normativa europea de protección de denunciantes de corrupción y otras irregularidades y, al igual que otros países europeos, tendrá que pagar una multa.
Un retraso del poder legislativo checo ha desembocado por primera vez desde la incorporación del país a la Unión Europea en la imposición de una multa. La ley a la que Chequia no ha reaccionado a tiempo es la de protección de denunciantes de corrupción y otras ilegalidades, más conocida como la directiva Whistlebowing de la UE, para que los profesionales que informen de irregularidades cuenten con la garantía de que no sufrirán represalias por ello. Así explicó a la Radio Checa la importancia de esta ley Šárka Zvěřina Trunkátová, directora de la ONG Oživení.
“Es difícil ser la persona que da parte de un problema, porque está en una posición de desigualdad, de dependencia con respecto al empleador, y además estas estructuras suelen ser complejas… A menudo, en consecuencia se toman medidas de respuesta. El colectivo laboral se fragmenta, uno se expone al ostracismo, a problemas en el puesto, bajan las pagas extra, le pasan a otro trabajo o le despiden”.
Según un sondeo realizado por la ONG hace tres años a dos mil personas, un tercio de los checos se ha encontrado alguna vez con una actuación poco ética o directamente ilegal en su trabajo. Sin embargo, nadie suele denunciar, tanto por miedo como por la sensación de que no van a conseguir cambiar nada, según las conclusiones del estudio.
La multa, que también deberán abonar países como Alemania, Luxemburgo o Estonia, entre otros, será de algo menos de 2.300.000 euros, aunque esto es una estimación, porque todo dependerá del día en el que se emita el veredicto. De todos los países multados, Chequia es el que tendrá que pagar menos.
El plazo para adoptar la ley concluyó en diciembre de 2021, pero en Chequia solo ha pasado su primera lectura en la Cámara de Diputados. Para varias ONG, la ley debería estar aprobada desde hace tiempo, explicó Ondřej Kopečný, de Transparencia Internacional.
“Si el gobierno actual hubiera querido adoptar la ley rápidamente, tuvo la oportunidad de hacerlo poco después de su investidura, ya que el Gobierno anterior había preparado una ley que en nuestra opinión era mucho mejor que la actual. Permitía acometer también las infracciones y reconocía las denuncias anónimas”.
Pero son precisamente las denuncias anónimas lo que no convence al Ministerio de Justicia, a cargo del Partido Cívico Democrático (ODS). Si no se toman en consideración, la administración no podría dedicarse a denuncias no firmadas, pero tampoco se debería hacer caso a las que no se refieran a delitos penales, lo que critican las organizaciones que luchan contra la corrupción. Una de ellas, Reconstrucción del Estado, asegura que el 58% de todas las denuncias son anónimas, y con la mayor parte de ellas se llegan a descubrir graves delitos.
Sin embargo, por las declaraciones del diputado del ODS Karel Haas, parece que no están dispuestos a dar su brazo a torcer, y defienden que la ley checa de protección de denunciantes no debería exceder a lo pedido por la directiva europea, dejando fuera dichas denuncias anónimas.
“¿Qué tiene de heroico una denuncia anónima? Yo creo que en el siglo XXI, la República Checa necesita más bien gente valiente y capaz de argumentar públicamente en cualquier área de actividad. Además, al incorporar las denuncias anónimas, de forma ilógica se va contra cualquier forma de protección, que es el punto central de esta ley”.
Sin embargo, dentro de la propia coalición de Gobierno, Partido Pirata y Alcaldes e Independientes (STAN), sí pretenden que, al menos en parte, se tomen en consideración todas las denuncias, anunció la diputada de STAN Hana Naiclerová.
“Internamente hemos decidido ya de alguna forma que deben ser incluidas las infracciones en este régimen, no solo los delitos. Y según todos los indicios, parece que estaremos a favor de que las denuncias anónimas sean también incorporadas en lo que se refiere a la administración pública”.
De lo que se deduce fácilmente que a la ley de protección de denunciantes le queda aún un largo camino por recorrer hasta ser aprobada en Chequia.
