Sueldos, jubilaciones, héroes y ganadores
Comenzamos hoy hablando de la crisis económica que nos sigue preocupando y mucho. Una prueba están siendo las multitudinarias manifestaciones que se están celebrando en toda Europa encabezadas por los sindicatos. Esta semana se ha llevado a cabo una marcha en la capital checa, una de las más concurridas de los últimos años a nivel europeo, se calcula que alrededor de 20.000 personas acudieron.
El jefe de la Confederación Checo-Morava de Sindicatos, Milan Štěch, advirtió que algunas empresas reducen temporalmente los sueldos, pero que no tienen previsto volver a aumentarlos, una vez superada la crisis.
“Existe un gran peligro que allí donde se reducen los sueldos, habrá tendencias por parte de los empleadores de conservar los salarios reducidos también en el futuro. Eso significaría una brusca caída del nivel de la vida y eso tenemos que impedirlo”, subrayó Štěch.
Los manifestantes protestaron, además, contra las reformas del sistema de jubilaciones y las previstas modificaciones del código laboral. Josef Středula, presidente de la Organización Sindicalista KOVO, exhortó al Gobierno a que suspenda esos proyectos.
“Les exhortamos que eviten que los que no causaron la crisis, sean los que más sufran por sus crueles impactos. No tomen la crisis como un pretexto para modificar el código laboral que restringirá los derechos de los empleados, e incluso quiere introducir la posibilidad de despidos sin una justificación debida”, resaltó Středula.
La manifestación del sábado en Praga fue una de las mayores a nivel europeo en los últimos años. Parecidas manifestaciones se efectuaron en otras ciudades comunitarias y miles de sindicalistas extranjeros, entre ellos polacos, austríacos y eslovacos, llegaron a Praga para apoyar a los checos.
Les contamos ahora que Instituto Checo de Estadística ha publicado un estudio sobre la evolución de la población checa. El dato más interesante ha sido que en 2065 uno de cada tres checos estará jubilado y uno de cada cinco será extranjero.
La población checa envejece. Así lo afirma el último estudio de tendencias demográficas. La pirámide de población está cada vez más invertida y si no fuera por los extranjeros, el número de habitantes de la República Checa sería menor en 2065. De hecho para esa fecha se calcula que la proporción de extranjeros alcance el 18 por ciento y la población se eleve ligeramente en unas 200.000 personas.
Y es que el índice de natalidad, aunque ha pasado de 1,5 a 1,7 hijos por mujer, sigue siendo menor de los 2,1 hijos necesario para mantener la población. Además, la esperanza de vida se elevará a los 86 años para los hombres y 91 para las mujeres. Actualmente viven en el país unos pocos cientos de ancianos centenarios. Dentro de cincuenta años serán unos 15.000.
En opinión de la gerontóloga checa Iva Holmerová, esta situación no debe considerarse necesariamente negativa.
“Este envejecimiento de la población es una buena noticia. No es motivo para el pánico. Vamos a envejecer, pero eso significa que vamos a vivir más tiempo y estaremos más sanos, con lo que disfrutaremos mejor de la vida. Pero por supuesto, ante el envejecimiento de la población hay que adaptar la sociedad a las necesidades de la tercera edad. Porque la vejez es una parte natural de la vida”, sostuvo Holmerová.
La reducción de la población activa traerá sin embargo serios problemas al sistema de pensiones, que seguramente habrá de reformarse, de la misma manera que se modificará la asistencia social o el sistema educativo, como apuntan los sociólogos. Será un país con menos escuelas y más hogares del jubilado.
Continuamos con una noticia que refleja el poder de la solidaridad. Se trata de la celebración del cien cumpleaños de Nicholas Winton. Nicholas Winton es el hombre que salvó la vida de 669 niños judíos durante la ocupación nazi de Checoslovaquia. Amplía la noticia Daniel Ordoñez.
Una fuente de piedra en la que se lee el nombre de Nicholas Winton recordará la proeza del inglés en el Jardín de los salvadores de niños, inaugurado con motivo de su cumpleaños en el parque de Petřín de Praga.
A la ceremonia acudieron incluso algunos de aquellos niños que Winton sacó a tiempo del país en sus trenes, como es Dagmar Šímová, quien aún hoy se emociona recordando la escena de dolor de su familia cuando la despedía en la estación de Praga.
“Padres que tienen que entregar a sus hijos, no es nada sencillo. Pero era la única manera de salvarnos. Ellos lo pasaron mucho peor que nosotros, que no éramos conscientes de todo lo que iba a ocurrir”.
Nicholas Winton, un empleado de banca en Londres en 1938, vio claramente la amenaza que se cernía sobre los judíos checos mientras el resto del mundo lo ignoraba o miraba para otro lado. Winton pidió vacaciones, se trasladó a Praga y arregló la documentación de los niños más amenazados. En un total de siete trenes, desde marzo a agosto de 1939, 669 niños escaparon del infierno del holocausto hacia una nueva vida en Inglaterra. Un último tren, en el que debían de partir 251 niños más, el tres de septiembre, no pudo salir por el cierre de la frontera que siguió al comienzo de la Segunda Guerra Mundial dos días antes. La mayor parte de ellos no sobrevivió, y Nicholas Winton tuvo que pedir dinero y falsificarse una nueva documentación para huir a Inglaterra. Se calcula en más de 5.000 las personas, contando a los descendientes de los niños salvados por Winton, las que deben su vida al buen corazón de este modesto inglés.
Abordamos ahora el tema deportivo, y es que esta semana se ha hecho con el título de campeón de liga por segundo año consecutivo el Slavia de Praga.
El equipo rojiblando este año no tuvó que esperar hasta el último partido del campeonato como en la temporada pasada, sino que ya a falta de dos jornadas, pudo grabar su nombre en la Copa de campeón de Primera División del fútbol checo.
Las últimas tres temporadas han sido fabulosas para el Slavia de Praga. En 2007, los rojiblancos lograron clasificarse para la Liga de Campeones por primera vez en su historia y en los últimos dos años alzaron la copa liguera.
El portero Martin Vaniak tiene gran mérito en la reciente racha triunfante del Slavia. El eslovaco, que cumplirá en octubre los 39 años de edad, está viviendo un final de carrera fantástico, según dijo.
“A mis años no esperaba que podría lograr algo parecido, que casi a los 40 podría alcanzar dos títulos consecutivos, así que me alegro mucho. Si ahora el Slavia compra a un portero mejor que yo, no me importa. Creo que este equipo necesita a un guardameta joven y con futuro que actuaría aquí otros cinco o diez años. Yo me voy a sentar tranquilamente en el banquillo para cubrirle la espalda”, afirmó.
Para poder iniciar los festejos, los rojiblancos necesitaban como mínimo empatar en el estadio del Viktoria Žižkov. Pero el campeón no se conformó con defender el título y lo conquistó con frente en alto.