Pussy Riot y El Tíbet amenazan las exportaciones checas
Para el primer ministro checo, Petr Nečas, la lucha por la defensa de los Derechos Humanos es un asunto de moda que puede llegar a afectar las exportaciones del país. En el discurso de apertura de una nueva edición de la Feria Internacional de Maquinaria el jefe del Gobierno trató de congraciarse con Moscú y Beijing.
“La falsa y artificial adoración de asuntos como, por ejemplo, el grupo ruso Pussy Riot, que dicho sea de paso es la máxima representación del mal gusto, no simboliza de ninguna manera ni la libertad ni la democracia”.
Las declaraciones del primer ministro dejaron atónitos a determinado sector político y gran parte de la opinión pública, pero eso no fue todo, el jefe del Gobierno fue más allá, calificó de negativo el apoyo al Premio Nobel de la Paz y líder espiritual tibetano, el Dalai Lama.
“La moda política conocida como “dalailamismo”, o sea la adoración del Dalai Lama, no representa un apoyo a la libertad y democracia, a pesar de las simpatías por la autonomía cultural de los tibetanos. En caso de un apoyo incorrecto, teóricamente puede poner en duda la política checa de apoyo a una sola China”.
Uno de los primeros en manifestar su desacuerdo con las declaraciones de Nečas fue el ministro de RR.EE., Karel Schwarzenberg, que tiempo atrás participó en una manifestación de apoyo a Pussy Riot celebrada en Praga.
El jefe de la diplomacia dijo que se encontraba horrorizado por las palabras de Nečas sobre El Tibet y que esperaba que ningún ministro de RR.EE., baje la cabeza ante las potencias en lo que a los Derechos Humanos se refiere.
El primer ministro checo se expresa sobre el tema de la defensa de los Derechos Humanos como si de un asunto de moda se tratara y recomienda a los políticos tener cuidado, porque el apoyo a determina persona o grupo de personas puede disgustar a los gobernantes de determinados países.La antigua vicepresidenta de la Corte Constitucional, Eliška Wagnerová, dijo que es lamentable que se trate de eliminar el legado de Václav Havel, incansable luchador por la defensa de los Derechos Humanos en el mundo.
Activistas de ONG alertan ante el hecho de que el primer ministro trata de quedar bien con Dios y con el Diablo. “El apoyo de la democracia y los Derechos Humanos ha sido un elemento constante de la política exterior checa. La historia nos enseña que ceder ante los regímenes autoritarios nunca ha dado buenos resultados” sostuvo Filip Šebek, de Foro 2000.Las palabras de Nečas envían a la comunidad internacional un mensaje ambiguo. El politólogo Ladislav Mrklas llama la atención sobre el hecho de que los representantes oficiales promulgan valores, pero después defienden intereses.