¿Por qué los alemanes tienen un salario mucho mayor que el de los checos?
Varios analistas desgranan los factores que explican la diferencia salarial entre los trabajadores checos y los de la vecina Alemania.
Considerada como la cuarta potencia mundial y el motor económico de la UE, Alemania suele ser usada como ejemplo de prosperidad. Las diferencias entre el país germano y Chequia son notables en varios aspectos como, por ejemplo, en clave salarial; mientras que el salario medio alemán supera los 4000 euros mensuales, en Chequia este se mueve en torno a los 1500, una brecha que los analistas achacan a diferentes factores.
La productividad es uno de ellos. Los expertos coinciden en que en Chequia todavía no existe demasiada producción de bienes ni se proporcionan servicios de alto valor agregado. Los alemanes tienen una productividad laboral a largo plazo mucho más alta, lo que repercute en los salarios.
“No significa que los checos trabajen de manera menos eficiente, sino que, en promedio, ocupan puestos menos calificados debido a la diferente estructura de las economías”, señala Pavel Sobíšek, economista jefe de UniCredit Bank.
Otro factor es el educativo, clave para obtener trabajadores calificados que contribuyan a esta transformación económica.
“Alemania tiene 31 universidades en el TOP 500 mundial, Chequia solo una. Esto significa una menor probabilidad de que las empresas lleven a cabo la investigación y el desarrollo necesarios para innovar aquí”, afirma Filip Pastucha, analista de Deloitte.
En esta línea, los analistas también señalan la ‘fuga de talentos’ y cierta incapacidad para atraer a los extranjeros.
“La salida de talento checo es grande. Mientras que los talentos checos se sienten atraídos por las excelentes condiciones en el extranjero, ya sea en forma de escuelas o de una carrera prometedora, Chequia no es muy acogedora para los talentos de Europa del Este”, apunta Aleš Rod, director de investigación del Centro de Análisis Económico y de Mercado.
La estructura de propiedad de la economía, con gran cantidad de empresas con sede o capital en el extranjero, la burocracia y la regulación excesiva del entorno empresarial o una insuficiente interconexión entre sectores clave de la economía son otras de las claves que señalan los expertos para explicar las grandes diferencias entre territorios.