"Piensen en nosotros", dicen soldados del Hospital de Campañacheco
El Séptimo hospital de campaña checo ha partido este jueves para Iráq. ¿Cuáles son los sentimientos de sus miembros que durante semanas, y hasta meses, estarán lejos de su patria, de sus familiares y amigos, en un país donde la dictadura y la guerra dejaron sangrientas huellas?
"Crucen los dedos", "No se olviden de nosotros", "Piensen en nosotros", estos fueron los deseos más comunes expresados por soldados del Séptimo hospital de campaña checo a la hora de partir.
El teniente coronel Vladimír Skranka es un soldado experimentado en las misiones internacionales, estuvo en Albania y Afganistán. Estar dislocado en Iráq es para él una rutina, parte del trabajo que eligió y que le gusta. "No viajo allí con miedo, uno debe confiar en que todo saldrá bien", resume sus sentimientos Vladimír Skranka.
También el capitán Tomás Zboril opina que en Iráq no habrá lugar para el miedo.
"En el Séptimo hospital de campaña hay mucha gente que participó en varias misiones donde ha ganado valiosas experiencias, domina su trabajo y sabe que una de las cosas más fundamentales es contener el miedo. Es consciente de que con el miedo no podría prestar una ayuda eficaz".
La sargenta Edita Kurfurstová parte por primera vez y por ello no sabe qué le espera, qué condiciones o qué peligros. "Pero viajo con la consciencia de que tengo el pleno apoyo de mi novio y de mis padres, que así estarán conmigo todo el tiempo", subraya Edita Kurfurstová.
También para el psicólogo del hospital, Pavel Král, será la primera misión.
"Mis compañeros estarán separados de sus familias y amigos íntimos durante mucho tiempo. Con cada día que estén allí, crecerá su añoranza por el hogar. Trataré de hacer todo lo posible para ayudarles a superar los problemas".
Y el capellán castrense, Ivan Havlícek, remite a los ciudadanos checos: "Quien sepa y quiera rezar, rece por nosotros, quien no, deséenos todo lo bueno, que regresemos sanos y salvos".