Otros dos cócteles molotov vuelven a causar pánico entre la comunidad gitana
Dos cócteles molotov fueron lanzados contra un bloque de viviendas habitado mayoritariamente por gitanos en la ciudad de Opava este fin de semana. Al igual que en el ataque del mes pasado en la colonia de Bedřiška, en Ostrava, los recipientes no estallaron y no provocaron daños, pero el miedo y la amenaza están cada vez más presentes para la etnia gitana checa.
“Salí temprano de casa y vi en la entrada una cesta. Me acerqué y al lado en el suelo había además dos botellas. Una ya no tenía líquido dentro y la otra sí. Así que llamé a la Policía Local enseguida para que viniera a ver qué pasaba”.
La Policía aún no ha determinado qué sustancia era exactamente la empleada por el agresor o los agresores, de quienes igualmente parece no haber pistas por el momento.
El ministro de Interior, Martin Pecina, reaccionó prometiendo la acción del Estado de Derecho contra los criminales: “Este asunto no podemos infravalorarlo. El extremismo, como he dicho muchas veces, lo combatiremos siempre en esta sociedad democrática y la única cuestión es hasta qué punto seremos capaces de reprimirlo”.
Y es que para la comunidad gitana llueve sobre mojado. En un ataque similar ocurrido en el poblado de Bedřiška, en Ostrava, hace un mes, una joven de 14 años logró en segundos apagar el pequeño incendio que había causado la caída a centímetros de ella de otro cóctel molotov que por fortuna no reventó. La investigación solo ha concluido que clase de líquido inflamable se empleó, pero de momento nada se sabe de quiénes lo lanzaron contra la ventana de la casa. La Policía continúa investigándolo como intento de asesinato, por lo que cabría esperar penas ejemplares.Pero en la memoria de todos prevalece el peor ataque llevado a cabo contra toda una familia. Hace justo un año, en abril de 2009, en Vítkov, también en la comarca de Opava, otro cóctel molotov hería a tres personas mientras dormían. La de mayor gravedad, la niña Natálka, que aún no había cumplido los dos años de edad, tras semanas en coma lograba milagrosamente sobrevivir a las quemaduras del 80 por ciento de su cuerpo. El proceso contra los tres imputados por esa acción comienza el próximo 11 de mayo en Ostrava.