El sector automovilístico se desploma: caída en la producción y pérdidas billonarias
El sector automovilístico checo prevé producir 250 000 vehículos menos que en 2020. El impacto económico será de 8000 millones de euros menos en ventas.
La maltrecha industria automovilística sufrió un nuevo golpe con las preocupantes nuevas cifras sobre su estado. Las previsiones hablan de que los fabricantes de automóviles checos producirán cerca de 250 000 vehículos menos que el año pasado. La escasez mundial de chips y otros componentes electrónicos representa el motivo principal de este descenso.
Traducido a cifras económicas, el sector automovilístico perderá cerca de 8000 millones de euros en ventas, según informó la Asociación de la Industria Automotriz (AutoSAP).
También estimó una caída de un 53% en la producción de automóviles para particulares en el mes de septiembre, cuando se produjeron algo más de 55 000 vehículos.
"Ya desde agosto, la producción se ha visto significativamente afectada por las restricciones y la estadística de septiembre confirma la tendencia negativa", dijo AutoSAP. La asociación también pidió soluciones al gobierno y apuntan a algún tipo de programa de ayudas a las empresas que les permita hacer frente, entre otras cosas, al pago de los salarios de los empleados inactivos.
El sector del automóvil representa uno de los pilares de la economía checa. Emplea a cerca de 180 000 trabajadores y representa una cuarta parte de la producción industrial.
El país acoge la producción de vehículos de Škoda, Hyundai y Toyota, entre otras, repartida en un total de cinco plantas. Las tres marcas han sufrido importantes reveses en el último tiempo. Škoda Auto, por ejemplo, se vio obligada a disminuir considerablemente o cesar su producción en sus fábricas en varias ocasiones durante el último año.
