La segunda edición de la Comic-Con llegó por fin a Praga
El popular festival Comic-Con aterrizó en Praga por segunda vez. El evento congregó a miles de fans de la ciencia ficción, fantasía, horror y cultura pop en general. Pavel Renčín, uno de los directores de esta Comic Con, reflexionó sobre el evento.
Han pasado 51 años desde que Sheldon Dorf y algunos allegados organizasen la primera Comic-Con en San Diego, en California, en 1970. La suya es una de esas historias llenas de romanticismo en las que el éxito llega de la nada: de un sótano a atraer a casi 200 000 personas en un centro de convenciones. 51 años después de aquella iniciativa pionera, la Comic-Con es un evento de talla internacional que congrega cada año a fanáticos de la ciencia ficción, la fantasía, el horror, los cómics y la cultura pop en general. San Diego podría ser considerada como la meca, el lugar donde la pasión por este mundo es llevada a su máxima expresión a través de un evento majestuoso.
Sin embargo, el entusiasmo de los fans no tardó en hacer que los eventos de este tipo se multiplicasen, primero por Estados Unidos y después por el mundo entero. Así, en 2021 encontramos cientos de citas que convocan a los apasionados de este mundo. Entre estas citas podemos encontrar la Comic-Con de Praga, que volvía a la capital checa tras una primera edición que dejó en los fans un grato sabor de boca.
Pavel Renčín es una de las personas que hizo posible que el evento tuviese lugar por primera vez en Praga. Este año, casi contra todo pronóstico, consiguió ofrecer a los fans una segunda edición, a pesar de hacerlo en un contexto bien diferente: de convulsión, de incertidumbre, de restricciones, de mucho y muy duro trabajo que, por suerte, hizo posible que este pasado fin de semana Praga volviese a ser la capital del cómic durante tres días.
“Estamos muy contentos de estar aquí, en la segunda edición. La primera fue un gran éxito. Estábamos muy contentos por ella y justo una o dos semanas después de celebrarse, el COVID llegó a la República Checa. Así que tuvimos que esperar veinte meses, posponer este evento dos veces y tras moverlo y moverlo conseguimos organizar esta edición. Hasta ahora estamos contentos ya que, aunque quizás no sea tan grande como la edición anterior, es genial”.
Tal y como apunta Renčín, la pandemia, frecuentemente, ha impedido que los amantes de diferentes disciplinas pudieran dar rienda suelta a su pasión como antaño. Desde eventos deportivos hasta conciertos o espectáculos de todo tipo. Por eso, los organizadores de esta Comic-Con hicieron un esfuerzo doble. Si organizar un evento de esta magnitud ya es complejo de por sí, el contexto actual lo hace más aún. Renčín se refirió a algunos de los problemas a los que se enfrentaron para que todo pudiese salir adelante.
“Tuvimos grandes problemas con nuestras estrellas invitadas, actores de Estados Unidos y otros países europeos, porque durante el COVID todo se detuvo. Hubo muchos cambios con los invitados pero fuimos capaces de traer a otros que también son increíbles, así que estamos muy contentos. Quizás fuese un poco molesto para los fans. Por ejemplo, Cristopher Lambert iba a venir pero al final no pudo hacerlo, pero conseguimos traer a Michael Biehn, así que es genial”.
Dentro de la organización, el contenido del evento siempre resulta uno de los puntos más difíciles de abordar. Por ejemplo, tal y como afirma Renčín, concretar la llegada de diferentes invitados extranjeros resultó casi un quebradero de cabeza. Pero además de esto, el gran desafío al que se enfrenta la organización es brindar a los fans una buena experiencia. Según él, la clave es mantenerse fiel a su espíritu y a su compromiso con los fans, que es donde reside la esencia del evento. Renčín cree que es una de las muchas cosas que hacen de la Comic-Con de Praga un evento especial.
“Creo que la Comic-Con de Praga es un evento muy especial. Hay muchísimas cosas para hacer aquí. El resto de Comic-Con normalmente intenta concentrarse más en las estrellas invitadas y en la mercadotecnia, en vender franquicias populares. Pero aquí tenemos un programa basado en los fans. Se trata de un programa creado por los fans y para los fans. Tenemos un montón de contenido sobre videojuegos, competiciones y también juegos de mesa, que son muy populares en la República Checa. Toda Comic-Con también ha de tener cosplay. Este se está haciendo muy popular en la República Checa, cada año tenemos más y más cosplayers. Es genial verlos ya que es muy visual”.
Con el programa de esta edición se trató de emular el éxito de la anterior. La Comic Con, en sus diversas ediciones, se caracteriza por ofrecer actividades relacionadas con la ciencia ficción, el cine, la televisión, los cómics, la fantasía y la cultura pop en general. Uno de los platos fuertes suele ser la presencia de actores invitados, que dan charlas y realizan encuentros para firmar autógrafos y hacerse fotografías con los fans. La edición de este año contó con Michael Biehn, actor estadounidense que trabajó en las sagas de Terminator y Alien o, Ray Stevenson, famoso por interpretar a Tito Pullo en la serie Roma o a Frank Castle en el film El castigador, entre otros.
También destacan los llamados cosplayers, quiénes que se disfrazan de sus personajes favoritos, o la sección de videojuegos, que ofrece multitud de experiencias y competiciones. Otro gran atractivo son los diseñadores, dibujantes o guionistas invitados, que comparten unas horas con sus fans y firman ejemplares. Sin embargo, también se encuentran juegos de mesa, exhibiciones, conciertos, lecturas o venta de merchandising. Hay un sinfín de posibilidades.
El carácter multidisciplinar de la cita explica como todo tipo de personas confluyen allí. También debemos relacionarlo con el auge de una industria que vive un crecimiento sin precedentes desde hace algo más de una década.
La historia de Sheldon Dorf y esos pioneros de la primera Comic-Con sería un buen ejemplo para ilustrarlo: lo que empezó como algo pequeño, casi contracultural y con un público marginal, acabó por ser todo un fenómeno de masas que genera cifras multimillonarias cada año. Pavel Renčín reflexionó sobre porqué este mundo ha adquirido una nueva dimensión.
“Estoy convencido de que todo empezó en los años 70 en los Estados Unidos. Las primeras Comic-Con estaban principalmente enfocadas en el cómic. Estados Unidos es algo así como la nación del cómic. Todo empezó con los cómics y era algo principalmente para frikis. Ahora la industria del cine y los videojuegos, por ejemplo, las películas de Marvel o las películas de ciencia ficción se han hecho muy populares. También pasa con la industria de los videojuegos. Hace veinte años los videojuegos eran para frikis pero ahora realmente es una industria enorme y muy popular. La gente ama la fantasía, ama jugar, ama la creatividad y creo que Comic-Con es un lugar donde todo gira en torno a esto. Todo ha crecido enormemente en los últimos veinte años o treinta años. Mucha gente ama algo de esto y vienen aquí y conocen a otros fans y aprenden cosas nuevas, porque de eso se trata el evento”.
Basta darse un paseo por el O2 Universum para percibir el bullicio del lugar y el ambiente que se genera en este evento y entre los fanáticos. En cierto modo, durante tres días son ellos los protagonistas de esta cita. Esto hace honor a la consigna planteada por Renčín: “un evento creado por y para los fans”. Ellos son la prueba de la buena salud de una industria que no para de romper nuevos límites. Por ejemplo, el fenómeno gamer, referido a los videojuegos, genera cifras multimillonarias cada año y causa furor entre un público mayoritariamente joven. Por ejemplo, en España las cifras muestran que la industria del videojuego genera anualmente unas cifras superiores a las del cine y la música juntas. Esta industria no para de crecer y podría consolidarse como el principal sector entre el ocio y el entretenimiento. No solo eso, sino que los videojuegos prometen convertirse en la seña de identidad de toda una generación que ha crecido frente a pantallas y píxels y pulsando teclas.
El entusiasmo de unos fanáticos ansiosos hace que muchos ya se pregunten acerca de la Comic-Con Praga 2022. Renčín, trató de dar alguna pista acerca de la próxima edición.
“Empezaremos a trabajar duro en ello este lunes porque está muy cerca, debería ser en febrero de 2022 y quedan como cuatro meses para eso. Queríamos celebrar una Comic-Con cada febrero pero debido a que tuvimos que posponerlo por el COVID estamos muy cerca de la edición del próximo año. Tenemos ya como cinco o seis actores que tuvimos que mover de esta edición a la siguiente. Así que tenemos algunas cosas preparadas, pero aún hay muchas más sorpresas por llegar”.
La Comic-Con cerró sus puertas este domingo tras acoger durante tres días a 18 500 asistentes llegados de todo el mundo. Para los fans la buena noticia es que no tendrán que esperar demasiado para volver a reunirse en una nueva edición, que tendrá lugar entre los días 18 y 20 de febrero del 2022 en el mismo O2 Universum de Praga.
