Petr Sís sueña con gatos callejeros
En el Festival Internacional de Cine de Karlovy Vary se estrenó el documental Sueños sobre gatos callejeros, de David Sís. En una carta de amor fraternal, el cineasta cuenta la extraordinaria vida y obra de su hermano Petr Sís, prestigioso ilustrador y autor de libros para niños.
‘¿Hermano, sabes lo que siempre me ha interesado? ¿Cómo se te ocurre qué dibujar?’ Con esta pregunta empieza el documental Sueños sobre gatos callejeros (Sny o toulavých kočkách) de David Sís sobre su hermano Petr Sís, el famoso artista de origen checoslovaco, que reside en Estados Unidos desde los años ochenta.
El documental no ofrece una respuesta directa, pero la inspiración de Petr Sís se puede leer entre las líneas en el relato. En un collage de material de archivo, entrevistas y pasajes animados, David Sís recorre la trayectoria de su famoso hermano. Desde sus años estudiantiles en Praga, cuando se adentraba en el periodismo, le apasionaba la música y ejercía como uno de los primeros DJ, su viaje a Estados Unidos del que no regresó, hasta la fama que se ganó en el mundo.
El director del documental contó a la Radio Checa las dificultades que supone crear una película sobre alguien tan cercano.
“No recomiendo a nadie hacer un documental sobre un pariente. No es la mejor idea. Se necesita mucha reflexión para no herir a la persona que uno quiere y no mostrar su vida de una manera que no le guste”.
Posiblemente como resultado de esta reflexión, David Sís decidió enfocarse en lo bueno, por lo que su documental da la impresión de ser una especie de carta de amor a su hermano, con quien se volvió a encontrar después de la Revolución de Terciopelo, tras verse separados durante años por el Telón de Acero y el océano Atlántico. David Sís eligió ese camino a pesar de las posibles críticas que le llovieran, según contó en un debate en Karlovy Vary organizado por la Televisión Checa.
“En un momento decidí que quiero a mi hermano y por eso la película será completamente positiva, aunque algunos espectadores o críticos probablemente me lo reprochen. Porque desde hace años, con sus dibujos, mi hermano mejora el karma del mundo y desvía el equilibrio a favor de lo bueno. Para mí, pertenece al grupo de personas como Su Santidad el Dalái Lama. Quise hacer un documental plácido y bonito”.
La vida de Petr Sís la recuerda en el hotel Thermal de Karlovy Vary también una pequeña exposición, una línea de tiempo que marca sus hitos más importantes. Por ejemplo, cuando ganó el Oso de Oro en el Festival Internacional de Cine de Berlín por su cortometraje CABEZAS (HLAVY) y por poco ni se enteró. O cuando viajó a Los Ángeles, no regresó como debía, y el régimen lo declaró emigrante. Cuando diseñó el cartel para la película Amadeus de Miloš Forman. Cuando finalmente pudo volver a Chequia. Cuando se casó, nacieron sus hijos, publicó sus popularísimos libros o cuando recibió el Premio Hans Christian Andersen por su contribución a la literatura infantil.
En el acto de inauguración de la exposición, el director del Festival Internacional de Cine, Jiří Bartoška, expresó su felicidad porque también los checos lleguen a conocer más de cerca a Petr Sís.
“Estoy feliz de que el mundo haya descubierto a Petr, porque aquí (en Chequia) durante mucho tiempo no se supo de él. Estoy muy contento de que aquí en Karlovy Vary podamos contribuir a que se siga descubriendo y que podemos ver la película de David durante el festival”.
El propio Petr Sís se mostraba menos entusiasmado ante la idea de que surgiera una película sobre su persona. Incluso al ver el documental por primera vez en Karlovy Vary, admitió que le resultaba difícil mirarse en la pantalla.
David Sís y el productor de la película, Vít Bělohradský, tuvieron que hacer un esfuerzo considerable para que les diera luz verde, cuenta Petr Sís.
“Mi impresión era de que ya estaba muy viejo y que no tenía sentido. De que la era de la publicación de libros y las personas, y los edificios de Nueva York, que todo formaba parte del pasado. Pero ellos fueron listos. Estábamos de viaje con mi esposa Terry en una isla remota en Maine, Peacock Island, y ellos se enteraron de alguna manera. Es una isla a la que se tiene que ir en ferry. Y, de repente, allí estaban, habían venido desde Praga. Y me preguntaron si no quería hacer una película, o algo así, a lo que no podía decir que no, con el viaje que habían hecho”.
Además de la isla mencionada, la película se rodó en varios sitios diferentes, entre ellos, Praga, Nueva York o París. Por sus calles acompaña a Petr Sís un gato negro animado. Se trata de una especia de alter ego, al igual que el gato callejero, Sís afirma no tener un solo hogar.
Petr Sís es autor de una treintena de libros, en otros sesenta más colaboró como ilustrador. Los héroes de sus textos y sus dibujos suelen ser aventureros, soñadores y descubridores que tuvieron el valor de vivir su vida libremente, crear y expandir las fronteras del conocimiento humano. El último en ser publicado ha sido Nicky & Vera, un libro infantil que cuenta cómo Nicholas Winton salvó a 669 niños judíos de los nazis.
Sís diseñó tapices de gran formato que conmemoran a luchadores por la libertad como Václav Havel, Nelson Mandela, John Lennon y Martin Luther King. Se pueden apreciar en aeropuertos de todo el mundo.
Incluso los que conozcan bastante bien a Petr Sís posiblemente descubran algo nuevo sobre él gracias a la película. Por ejemplo, que su libro Tres llaves de oro (Tři zlaté klíče) lo editó la propia Jacqueline Kennedy, que creó un videoclip para Bob Dylan que no le gustó al músico o que una foto del pequeño hijo de Sís inspiró al escultor checo David Černý para crear las famosas esculturas de los bebés gigantes de Kampa.